Santos, No SuperhéroesSample

¡No raro… sino útil!
Sí, es verdad: algunos “santos” parecen venir de otro planeta. Esos que te miran con ojos místicos, hablan en parábolas hasta en el supermercado y parecen vivir a base de pan y ayunos. Pero detengámonos un momento: ¿eso es santidad o simplemente un personaje? Porque la verdadera santidad, la que nace del corazón de Dios, no te hace raro… te hace útil.
La santidad no es un disfraz de “profesional religioso”. No se trata de recitar versículos de memoria en cada ocasión, ni de hablar con voz de predicador hasta cuando pides un bocadillo. Se trata de estar dispuesto. Disponible. Concreto. Una persona santa es aquella que, cuando se necesita una mano, la extiende. Cuando hay una batalla espiritual, ya está de rodillas. Cuando hay un corazón que necesita ánimo, está ahí escuchando.
Jesús era el más santo de todos. Y sin embargo… atraía multitudes. Los pecadores se acercaban, no huían. Los niños lo amaban, no le temían. Los religiosos, sí, ellos lo juzgaban (¿pero eran más santos ellos o Él?). Jesús mostraba una santidad que olía a gracia, a acogida, a amor real. Y nosotros estamos llamados a vivir ese mismo tipo de santidad.
¿Quieres ser usado por Dios? Entonces permite que Él te purifique. No para ser perfecto, sino para ser un instrumento en Sus manos. Piensa en un vaso: si está limpio, lo usas con gusto. Si está sucio… pues no. La santidad no es para la apariencia, es para la función. No te hace más “espiritual”… te hace más preparado. Y créeme, en el Reino de Dios no hay honor más grande que ser útil para algo eterno.
Ora esta sencilla oración:
Padre, quiero ser útil, no solo “bueno”. Purifícame de todo lo que me hace pesado o inútil. Hazme un vaso limpio, listo para ser llenado y usado.
Scripture
About this Plan

¿Cuando escuchas la palabra “santidad” te dan ganas de salir corriendo? Tranquilo, no estás solo. Demasiado a menudo, la santidad nos parece una meta para unos pocos elegidos, un objetivo inalcanzable. Pero la verdad es que Dios no nos llama a ser perfectos: nos llama a caminar con Él, cada día, con sinceridad y deseo. Este plan bíblico te acompañará en un recorrido sencillo, práctico y real, para descubrir que la santidad no es una jaula… es libertad. No es una carga que llevar, sino un camino que vivir con alegría.
More
Related Plans

A Spirit-Filled Moment: Encountering the Presence of God

Unwrapping Christmas

Be Good to Your Body

A Spirit Filled Moment

The Heart Work

Refresh Your Soul - Whole Bible in 2 Years (6 of 8)

Biblical Marriage

Refresh Your Soul - Whole Bible in 2 Years (5 of 8)

LIVING LETTERS: Showing JESUS Through Your Life
