ORANDO POR SANTIFICACIÓN

Hace algunos meses comencé a trabajar en el ministerio juvenil, muchos de ellos vienen cargando con deseos y anhelos en su corazón. Algunos de ellos mencionan que tienen el deseo de crecer y madurar, otros ni siquiera se cuestionan si quieren crecer o no. Pero, estoy seguro, que esto sucede con personas mayores, adultos, jóvenes, ancianos, nuevos creyentes, personas de muchos años en la fe, damas, caballeros, etc. No importa quienes sean, algunos tienen el deseo de crecer y otros no. -Aquí pudieras preguntarte: ¿En dónde estoy yo?

Pero, la realidad es que no importa tanto la cuestión de tu situación actual, la pregunta que en verdad debería captar nuestra atención es, ¿deseo crecer en Santidad? Hay muchas razones por las cuales no queremos crecer, creemos que es algo complicado, no queremos esforzarnos, por ociosidad, falta de interés, y puede haber muchas razones más. Sin embargo, creo que la razón principal por la cual no deseamos crecer es por tener un concepto muy pequeño acerca de quién es Dios.

Y es que, si no conocemos a Dios, nuestro deseo por crecer será mínimo y muy corto, no habrá motivos suficientes para esforzarnos, o disciplinarnos. Por el contrario, si en nosotros está el deseo de comprender y conocer más a Dios, nuestro deseo de crecer en santidad será mayor día con día.

La santificación personal es algo que sucede progresivamente, sin duda es parte de esfuerzo propio para dedicarte a la disciplina de la oración y las lecturas de las Escrituras, pero aún más allá, sabemos que Dios está más comprometido con nuestra santificación, el deseo de Dios es que seamos santificados por completo, sin embargo, nosotros también debemos estar orando por esta santificación.

Como Juan también menciona, aún no se ha manifestado lo que habremos de ser, pero sabemos que Dios nos transformará (1 Jn 3:2)

Como vemos, el deseo de Dios es este, que día con día seamos transformados a la imagen de su Hijo Jesucristo (2 Cor 3:18) y si ese es el deseo de Dios, sabemos que Él cumplirá todo lo que ha propuesto porque “Fiel es Dios”. Esta es nuestra certeza.

Deberíamos orar para ser más santos, como Dios es Santo, pero esto tiene que ver con todo lo que somos. En todo nuestro ser, de manera integral debemos buscar la santificación, en nuestros pensamientos, emociones y físicamente hablando también (para ser sin pecado)

¿Cómo seríamos hallados si Jesús regresará hoy por nosotros? ¿Irreprensibles?

Oremos para tener más santidad en nuestras vidas.

● Adora: Adora a Dios por su fidelidad y Su paz, porque sabemos que nos llevará a estar con Él pero durante el proceso, nos da paz para confiar en su promesa.

● Agradece: Agradece porque Dios está dispuesto a santificarnos, agradece porque tenemos un propósito claro, de estar con Él para siempre.

● Confiesa: Confiesa en qué áreas tú has dejado de buscar la santidad, ya sea en la familia,trabajo, escuela etc.

● Suplica: Suplica que Dios te permita ser hallado irreprensible para cuando Él regrese, que te de un sentido más profundo de Su carácter y ser transformado a la imagen de Su Hijo.