Identifica a tu verdadero enemigo

Lo primero que debemos tener claro es quién es realmente nuestro enemigo. No es tu vecino que habla mal de ti, ni ese compañero de trabajo que te hace la vida difícil. Tampoco lo es la televisión o la presión de la sociedad que te dice cómo deberías verte o qué deberías tener. Esos son solo instrumentos.

Tu verdadero enemigo se llama Satanás.

La Biblia nos enseña que Satanás fue un ángel creado por Dios, pero su corazón se llenó de orgullo y envidia. Quiso ocupar el lugar de Dios y ser igual a Él. Por esa rebelión, fue expulsado del cielo junto con una parte de los ángeles que lo siguieron. Desde entonces, su propósito ha sido destruir todo lo que Dios ama, y eso te incluye a ti y a toda la humanidad.

¿Por qué te ataca Satanás?

Tal vez te has preguntado: ¿Por qué me ataca a mí?
La respuesta es sencilla: porque tienes un valor eterno que él ya perdió.

Cuando Jesús murió en la cruz y resucitó, nos abrió el camino a la salvación. Ahora, todo aquel que cree en Él es hecho hijo de Dios y heredero de una promesa eterna.

Satanás sabe que su destino final es el infierno. Sabe que tú, en cambio, tienes la oportunidad de pasar la eternidad con Dios. Por eso, con una envidia profunda y destructiva, busca engañar, acusar y tentar a la humanidad para que caiga en pecado, se aleje de Dios y pierda el propósito eterno que Él ha planeado.

No te confundas: Satanás usa medios, pero él es el autor

El enemigo usa herramientas modernas:
📺 Medios de comunicación,
👥 personas manipuladas,
🧠 pensamientos negativos y mentiras…
…pero no te confundas: el verdadero origen del ataque es él.

Él quiere verte frustrado, temeroso, sin propósito y atrapado en el pecado, porque así se asegura de alejarte del plan de Dios para ti. Pero hoy tienes la oportunidad de abrir los ojos espirituales, reconocer la batalla y caminar en victoria por medio de Cristo.