YouVersion Logo
Search Icon

Aliento Para Tiempos DifícilesSample

Aliento Para Tiempos Difíciles

DAY 5 OF 5

Una oración lo cambia todo

Una oración puede cambiarlo todo en nuestras vidas.

Quizás al leer lo anterior estés pensado: no creo que una simple oración pueda cambiar mi situación.

Yo creo que si oramos con fe, Dios responde nuestras oraciones; y aunque quizás no lo haga como nosotros esperamos, siempre lo hará para nuestro bien.

Hoy hablamos sobre la oración de Ana.

"Comenzó a orar al Señor con gran angustia y a llorar desconsoladamente. Entonces hizo esta promesa: «Señor de los Ejércitos, si te dignas mirar la desdicha de esta sierva tuya, y si en vez de olvidarme te acuerdas de mí y me concedes un hijo varón, yo te lo entregaré para toda su vida y nunca se le cortará el cabello»" (1 Samuel 1:10-11 NVI).

En esta porción de la Biblia, Ana estaba viviendo una situación muy difícil y complicada social y emocionalmente: ser una mujer estéril.

Durante ese tiempo, social y religiosamente, ser estéril era visto como la paga de un pecado o un castigo divino. Además, del sufrimiento personal por esa condición, era muy difícil vivir con la presión social que las mujeres recibían por su comunidad y la sociedad en la que vivían.

Ana había sufrido mucho, pero, su actitud cambió porque su fe y su esperanza estaban depositadas en Dios.

Ana hizo a un lado su realidad y su dolor y tomó una actitud diferente: orar en lugar de seguir lamentándose. Sin negar lo que estaba viviendo, decidió seguir confiando en Dios y tener fe por su milagro.

La oración de Ana fue respondida con el nacimiento de Samuel.

Ana llevó sus anhelos y dolor directamente delante de Dios en oración.

A pesar de que a veces es difícil ver y entender lo que Dios está haciendo y el porqué las respuestas a nuestros anhelos más profundos tardan tanto, podemos tener la confianza de que él escucha nuestras oraciones y está obrando. Dios simplemente nos pide que confiemos en él, tal como lo hizo Ana. Él nos invita a ir ante su presencia y presentarle el anhelo de nuestro corazón, nuestro dolor, nuestros deseos y nuestros quebrantos. Él nunca nos rechazará, ni menospreciará nuestras luchas. Dios es completamente digno de confianza.

Así como Ana alabó y confío en Dios, nosotros también podemos apoyarnos totalmente en Él. Dios es nuestro refugio seguro, nuestro fundamento firme y nuestra roca sólida. Podemos confiar en que aquel que nunca cambia nos sostendrá con firmeza durante los tiempos turbulentos. Nuestro Dios es eternamente fiel.

Sigue confiando en Dios, orando y creyendo por el milagro que sueñas.

Sigue creyendo.

Este plan devocional fue extraído y adaptado de mi blog, el cual escribo semanalmente y puedes leer aquí.

Si este plan fue de bendición para ti, me gustaría conocer tu historia. Escríbeme y cuéntame lo que Dios ha hecho en ti.