Libres Para EdificarSample

El Señorío de Cristo sobre todas las cosas
Antes de ser “mi” decisión, es “su” señorío.
"Porque ninguno de nosotros vive para sí, y ninguno muere para sí" (Romanos 14:7 RVR1960).
Pablo recuerda que no somos dueños de nosotros mismos. Vivimos y morimos para el Señor. Por tanto, nuestras decisiones —incluso las más personales— están bajo el señorío de Cristo. Esto no significa que todo deba ser uniformado, pero sí que todo debe estar sometido a Su voluntad.
Pablo, además, les recuerda a los cristianos romanos que ningún hombre es una isla. Nuestras vidas están conectadas a otras personas.
La libertad cristiana no es libertinaje. Es libertad para obedecer desde el amor, no desde el ego. Si Cristo es el Señor de mi vida, entonces cada acción debe reflejar su carácter y su propósito. La fe auténtica nos descentra de nosotros mismos para centrarnos en Él y en el bien del otro.
Pregunta para meditar:
¿En qué áreas de mi vida aún vivo como si Cristo no fuera Señor?
Scripture
About this Plan

La verdadera libertad en Cristo no es un permiso para imponer ni dividir, sino una invitación a amar, acoger y edificar. La verdadera libertad en Cristo no destruye, edifica; no impone, considera; no divide, une en amor y verdad. El principio que debe guiarnos no es el derecho individual, sino la edificación mutua: lo que no construye, debilita.
More
Related Plans

Run Well: Insights From Hebrews 12

Jesus Is…The Great I Am

Lessons From the Story of Gideon

Death Is Not the End: Healing & Hope Through Grief

Who Do You Think You Are? The Lies We Believe About Ourselves & the Truth That Sets Us Free

God’s Ongoing Work in Each of Us

Worship Is More Than a Song!

Growing in Faith | Mini Devotions for Women

When the Joy Is Missing
