Bondad y Sabiduría en EquilibrioSample

"RESPONDER CON OBEDIENCIA A LA VOZ DE DIOS"

"Si me amáis, guardad mis mandamientos" Juan 14:15 (RVR 1960).

Escuchar la voz de Dios representa apenas el inicio de un proceso más profundo: una vida guiada por la obediencia activa. La madurez en la fe no se determina únicamente por el nivel de entendimiento intelectual, sino por la disposición constante a actuar conforme a lo que se ha recibido, siempre desde el amor y la entrega sincera.

Jesús mismo enseñó que conservar y poner en práctica su palabra es la manifestación tangible de una relación genuina y viva con él. De esta manera, la obediencia no debe ser percibida como una carga o imposición, sino como una respuesta natural y voluntaria que nace del compromiso con ese vínculo espiritual.

“Respondió Jesús y le dijo: Si alguno me ama, mi palabra guardará; y mi Padre lo amará, y vendremos a él, y haremos morada con él” Juan 14:23 (RVR 1960).

La obediencia auténtica no es producto del miedo ni de la obligación, sino una expresión natural del amor verdadero. Cuando amamos genuinamente, obedecer deja de ser una carga para convertirse en una respuesta libre y confiada. Jesús no exige sumisión ciega, sino que invita a una relación donde el amor impulsa a guardar su palabra como un acto de comunión y entrega.

ORACIÓN

Señor, enséñame a amarte con un amor que se traduzca en obediencia sincera.
No quiero seguirte solo con palabras o emociones pasajeras, sino con una vida que guarda tu palabra por convicción y gratitud.

Que mi obediencia no sea por obligación, sino por la alegría de saber que tú haces morada en quienes te aman. Limpia mi corazón de toda resistencia, y ayúdame a responder con humildad cada vez que escucho tu voz. Amén.