Músicos Conectados Al Sonido EternoSample

DIA 3

“Creativamente creados”

Recuerdo que en mis años de adolescente yo estaba totalmente convencida de que “no era creativa”. Y así vivía, creyendo que la creatividad era un atributo que no me había sido dado, y pensando que esto era un don solo para algunos seres escogidos a quienes el resto de nosotros solo podíamos admirar.

Si eres de los que piensan así, quiero darte la buena noticia de que ¡eso es una mentira! La creatividad es un regalo que Dios nos dio a cada una de sus criaturas, porque al crearnos, lo hizo a su imagen y semejanza. Sus rasgos fueron plasmados en nosotros. ¿Y quién podría dudar de que el Creador de tantas maravillas no tiene creatividad? Él es, en esencia, un Dios creativo. Y esa esencia ha sido plasmada en nosotros desde la eternidad. La creatividad no es algo que podamos obtener en algún instituto, no es algo que podamos aprender, y no es algo que podamos forzar a que salga de nosotros. La creatividad es parte de la esencia con la cual nos creó a cada ser humano. Él es el Ser más creativo que existe. Creó todo, de la nada.

El gran salmista David tenía una fuente clara de inspiración creativa, que era la presencia de Dios. Y desde allí, no sólo compuso todos los salmos que nos han quedado registrados en las páginas de la Biblia, sino que improvisaba canciones mientras tocaba su instrumento de cuerdas, y, como si eso fuera poco, ¡creaba instrumentos musicales!

Pero muchas veces, aunque pasamos tiempo en su presencia, el orgullo, la timidez y el miedo logran su cometido en nosotros: Silenciarnos. Algunos enemigos de la creatividad que puedes enfrentar son la intimidación, el qué dirán, el orgullo, las heridas emocionales sin sanar, la falta de perdón y la timidez. Por el sacrificio de Cristo en la cruz y su resurrección, hoy tienes la victoria sobre cada enemigo de tu alma y corazón. ¡Llegó el tiempo de manifestarte, de hacer escuchar la eternidad que hay en tu corazón! No te conformes sólo con seguir escuchando las hermosas melodías de otras personas hacia Dios. Él desea escuchar lo que nace de tu corazón en amor hacia Él. Si nunca creaste una canción o alguna pieza instrumental, te aliento a que puedas hacerlo. No por la motivación de ser reconocido o de grabar algún álbum, pero sí con el impulso de poder plasmar en música todo lo grandioso que Dios es, y lo que fielmente hizo y continúa haciendo en ti.

Hoy comienza a adorar con tu instrumento musical y la Biblia abierta, y registra en audio y por escrito las palabras y melodías que nazcan. Compártelas con un amigo de confianza y juntos graben esas melodías dirigidas a tu amado Creador. No permanezcas más en la vergüenza, ¡suelta la esencia creativa que resuena en tu interior!