Vence Tus BarrerasSample

Día 2: Ordena tus prioridades

Una de las mayores barreras para seguir a Jesús es el desorden de nuestras prioridades. En Marcos 10:17–22 encontramos la historia de un joven rico que parecía tenerlo todo: educación, moral y una vida intachable. Pero cuando Jesús le pidió que lo dejara todo para seguirle, se fue triste, porque su corazón estaba en sus riquezas. Hoy muchos jóvenes viven lo mismo. Dios los ha bendecido con estudios, trabajo y familia, pero a veces esas bendiciones se convierten en excusas para no servirle. “Estoy muy ocupado”, “no tengo tiempo”, “mi familia es mi prioridad”, son frases comunes que muestran que hemos dejado a Dios en segundo lugar.

Jesús no pide que renuncies a tus responsabilidades, sino que lo pongas primero en todas las cosas. Él dijo: “Busquen primeramente el reino de Dios y su justicia, y todo lo demás les será añadido” (Mateo 6:33 RVR1960). Cuando tus prioridades están en orden, todo en tu vida encuentra equilibrio.

Piensa en el joven rico: su historia termina sin nombre. Nunca supimos más de él. Perdió la oportunidad de caminar con Jesús porque amó más lo temporal que lo eterno. Tal vez tus estudios, tu trabajo o tus planes son buenos, pero no pueden ocupar el lugar de Cristo.

Cuando Dios es el centro, tus decisiones reflejan fe, tus relaciones son guiadas por amor y tus metas tienen propósito. La verdadera libertad no está en tener todo bajo control, sino en rendir el control a Dios.

Oración:
Señor, enséñame a ponerte en primer lugar. Ayúdame a ordenar mis prioridades para que nada me aparte de ti. Que cada decisión, cada meta y cada sueño reflejen que tú eres mi tesoro. En el nombre de Jesús, amén.