La Fe Que JustificaSample

Nuestra fe, su justicia

"Y no solamente con respecto a él se escribió... sino también con respecto a nosotros (...)" (Romanos 4:23-24 RVR1960).

La historia de Abraham es también nuestra historia: justificados por fe en el Dios que resucita.

Pablo cierra el capítulo afirmando que la historia de Abraham no es una reliquia espiritual, sino un patrón eterno. Lo que Dios hizo con él, también lo hace con nosotros si creemos. Pero ahora el contenido de nuestra fe es aún más claro: creemos en el que resucitó a Jesús (v.24).

Cristo fue entregado por nuestras transgresiones y resucitado para nuestra justificación (v.25). Nuestra fe no es genérica; tiene un objeto preciso: el Cristo crucificado y resucitado. Esta fe conecta nuestro presente con la eternidad, y transforma nuestro estado ante Dios.

Así, Romanos 4 concluye mostrando que la justificación por fe no es una doctrina abstracta, sino una experiencia viva. Es la historia de todos los que creen en el Dios que da vida a lo muerto, y esperanza a lo imposible.

¿Estoy viviendo cada día con la seguridad de que he sido justificado por la fe en el Cristo resucitado?