Una Vida Transformada Para DiosSample

Una mente renovada para discernir

Una mente renovada ve la voluntad de Dios con claridad.

“…sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta” (Romanos 12:2b RVR1960).

Pablo no sólo nos llama a resistir la influencia del mundo, sino a ser proactivos para ser transformados. Esta transformación no es externa, sino interna, desde el entendimiento. El cambio profundo ocurre cuando nuestra manera de pensar es moldeada por la verdad de Dios, no por las mentiras del sistema.

La renovación de la mente sucede al exponerla continuamente a la Palabra, al Espíritu y a la comunidad de fe. Es un proceso, no un instante. Pero cuanto más renovada está nuestra mente, más capaces somos de discernir la voluntad de Dios —lo que es bueno, agradable y perfecto— y vivirla.

No se trata sólo de conocer la voluntad de Dios, sino de comprobarla: experimentarla, vivirla, saborearla. Una mente renovada no solo analiza, también obedece. Y allí encuentra vida plena.

Reflexión práctica:

¿Estoy invirtiendo tiempo y atención en renovar mi mente con la verdad de Dios o estoy llenándola con el ruido del mundo?

Oración:

Señor, transforma mi manera de pensar. Límpiame por tu verdad y enséñame a vivir según tu voluntad cada día.