Texto: Cuando Dios Habla, Todo CambiaSample

Visible: lo invisible también transforma.
Hay procesos que transforman desde adentro… aunque por fuera parezca que nada cambia.
Es como cuando empiezas a ejercitarte.
Los primeros días te sientes más cansado que motivado.
No ves músculo, no ves progreso, no ves nada.
Pero algo está ocurriendo.
Lo invisible… está haciendo su trabajo.
Lo mismo sucede con la Palabra de Dios.
A veces lees y sientes que no pasó nada.
O terminas y piensas: “¿Y esto qué tiene que ver conmigo?”.
Pero cada vez que te expones a la Escritura, algo se está formando en ti.
“Toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir y para instruir en la justicia, a fin de que el siervo de Dios esté enteramente capacitado para toda buena obra”
(2 Timoteo 3:16–17 NVI).
Ese “útil” no es decorativo. Es intencional. La Palabra de Dios enseña cuando no sabes,
reprende cuando te desvías, corrige cuando te equivocas, y entrena cuando quieres crecer. Y lo hace a su ritmo. No al tuyo.
Dios no trabaja con microondas. Trabaja con raíces profundas; y por eso, aunque no lo sientas, sí está obrando.
Lo que entra por tus ojos, por tus oídos… lo que meditas, aunque sea en silencio, está sembrando carácter. Está ajustando decisiones. Está limpiando mentiras que creíste.
Está formándote a la imagen de Jesús.
¿Quieres ser fuerte en medio de la crisis? ¿Quieres tener sabiduría para decidir? ¿Quieres amar como Jesús… incluso cuando no es fácil?
Entonces, permanece en la Palabra.
Aunque no siempre brille.
Aunque no siempre se entienda.
Aunque hoy no veas fruto.
Porque llegará el momento donde alguien dirá: “Algo en ti cambió… ¿qué fue?”.
Y tú sabrás que fue la voz de Dios, hablándote en lo secreto.
Pregunta para reflexionar:
¿Estás dispuesto a alimentar tu alma cada día, aunque el fruto tarde en llegar?
Oración:
Mi Dios, gracias por tu Palabra.
Gracias porque es más que letras: es vida, es verdad, es poder. Aun cuando no lo veo, sé que estás formando algo en mí. Ayúdame a permanecer, a confiar en tu proceso, y a no subestimar lo que estás haciendo en lo invisible. Hazme una persona firme, llena de tu verdad. En el nombre de Jesús, amén.
Scripture
About this Plan

Vivimos pendientes de las notificaciones. Pero hay un mensaje que ya llegó y puede transformar tu vida: la Palabra de Dios. Este plan te invita a redescubrirla como dirección, alimento y fundamento. No es magia. Es verdad viva. Y aunque no siempre lo sientas, está obrando. ¿Y si hoy reaccionaras a la voz de Dios con la misma urgencia con la que revisas tu celular?
More