Devocional Mayo "Lámpara a mis pies"Sample

“Y cuando al siguiente día los de Asdod se levantaron de mañana, he aquí Dagón postrado en tierra delante del arca de Jehová; y tomaron a Dagón y lo volvieron a su lugar" (1 Samuel 5:3).

Los filisteos capturaron el arca de Dios y la llevaron como un trofeo al templo de uno de sus ídolos. Al hacer esto pudieron comparar la realidad de Dios con la insensatez de su propia idolatría.

Vieron a su ídolo, en quien colocaban su confianza y a quien le entregan sus vidas, tirado en el piso. Tal era su incapacidad de actuar que estando en el piso no podía ni siquiera levantarse (por supuesto, una estatua que representa a una deidad no tiene ningún tipo de poder). Sin embargo, lo sorprendente de esta historia es que los filisteos prefirieron quedarse con su ídolo (que ahora no tenía manos o cabeza) antes que abrir los ojos y buscar al único Dios verdadero.

Quizás sea fácil para nosotros señalar a los filisteos como una tribu ignorante y supersticiosa, pero lo cierto es que el corazón humano (también en la actualidad) tiende a la idolatría. Hay personas que le dan la espalda a Dios por un trabajo, un político, un vicio, un equipo de fútbol o por cualquier otra cosa. Y, aunque quizás no se arrodillen delante de una estatua, su idolatría es tan insensata como la de los filisteos que eligieron una estatua rota de un ser imaginario antes que al único Dios que les mostró su gloria y poder.

Pide al Señor en oración que te muestre tu corazón y te permita ver si has estado levantando algún ídolo para que lo quites de ti. No desperdicies tu vida entregándola a un dios falso que no puede hacer nada por ti.