Devocional Abril "Lámpara a Mis Pies"Sample

“Y acuérdate que fuiste siervo en tierra de Egipto; por tanto, yo te mando que hagas esto” Deuteronomio 24:22.

Cuando leemos estos pasajes de Deuteronomio encontramos mucha sabiduría y consejos dirigidos a cómo debe ser nuestra manera de vivir. Dios anhela que podamos tener un corazón misericordioso hacia los demás y que nunca adoptemos prácticas del mundo aunque puedan parecer muy normales, como parte de nuestra cultura.

Vivir como lo describen estos versos es una verdadera prueba de fe: Sin tomar provecho cuando podemos hacerlo, pensando en los necesitados, sin oprimir al extranjero, etc. Pero algo que llama mucho la atención es como termina el capítulo 24.

El Señor nos exige que vivamos de una forma justa, porque nosotros un día también fuimos esclavos, tal vez no en Egipto como los patriarcas, pero si del pecado y de este mundo.

La misericordia es la muestra de que hemos recibido el evangelio, pero más importante, de que aún está vivo en nosotros. Si te olvidas de ayudar al que lo necesita, probablemente tu corazón se endureció y olvidaste que un día el necesitado eras tú.

Si bien sabemos que no podemos ser salvos por nuestras obras, nuestras obras si deben demostrar nuestra salvación. Hoy el Señor te hace un llamado a que mires la necesidad que hay a tu alrededor y a que recuerdes que la única diferencia entre ellos y tú es que un día alguien tuvo misericordia de ti.

Ve tú y haz lo mismo.