Fin De Semana De ReencuentroSample

Confía en el tiempo de Dios En nuestra vida de cristianos necesitamos aprender a confiar en el plan y tiempo de Dios. Por alguna razón Dios nos eligió para vivir en este tiempo de la historia. Cada día que pasa, hay una nueva historia para contarles a nuestros hijos, nuestros nietos, y nuestros tataranietos en los años que vendrán. «Ah, sí, me acuerdo tal año porque fue el año en que tal cosa paso en el mundo». Les contaremos de todas las cosas buenas y todas las cosas malas que pasaron en los años anteriores. Les diremos: «Este fue el peor año, este fue el mejor año». Les compartiremos las historias de los años que hemos vivido en nuestras vidas. Dios nos ha elegido para vivir en medio de guerras, pandemias, desastres naturales, y caos alrededor del mundo, para que brillemos con la luz de Jesucristo. De la misma manera, Dios eligió a todas esas personas en Hechos 2 para que se unan y sean uno en Cristo. Hechos 2:1 dice: «Cuando llegó el día de Pentecostés estaban todos unánimes juntos.» Todos juntos en un corazón. Nunca lograremos vernos todos iguales, tener la misma estatura, vivir las mismas experiencias o tener las mismas cosas en la vida, pero podemos tener un mismo corazón en Jesucristo. Dios ha elegido diferentes personas en este momento, durante este tiempo, para que seamos uno en Cristo. Es por eso que necesitamos confiar en el tiempo y los planes de Dios. Dios nos llamó para este mismo momento. Estamos aquí, y el poder de Dios viene a su tiempo. Tal vez muchas de las personas que estaban allí en el día de Pentecostés desearon que lo que sucedió sucediera en el día 30, o el día 40, ¡pero el tiempo de Dios era en el día 50! Necesitamos aprender a confiar en el tiempo y plan de Dios. Hechos 2:2 dice: «De repente vino del cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llenó toda la casa donde estaban». ¿Qué significa el viento? Simboliza un poder que es invisible. No podemos ver el viendo, pero vemos los efectos del viento. A través de las Escrituras vemos que el viento y el espíritu se mencionan indistintamente. El Espíritu Santo está llegando. El viento del Espíritu. Los versículos 3 y 4 hablan de las lenguas de fuego y del Espíritu Santo. ¿Qué significa el fuego en la Biblia? Simboliza la pureza y la presencia de Dios. El poder del Espíritu de Dios y la presencia de Dios se estaban moviendo ahí mismo en el Pentecostés mientras la Iglesia estaba siendo formada; y ahora que la Iglesia está renaciendo, necesitamos confiar en el tiempo de Dios y su plan a través del poder de Jesucristo, del poder de su Espíritu Santo, para que nos purifique para poder vivir nuestras vidas cristianas. Dios ha elegido este día, este momento, este lugar, para el renacimiento de su Iglesia. Dios está llamando a su pueblo. Dios quiere que su pueblo se una, que su Iglesia se una. «Es la sangre de Cristo que trae unidad, no el color de nuestra piel, o de dónde venimos».