AcércateSample

 Algunas de nosotras no somos muy buenas para terminar lo que comenzamos. Es por eso que este es uno de los versículos más reconfortantes en toda la Biblia para los creyentes. Nuestra salvación no depende de nosotras. No depende de nuestra capacidad de aferrarnos, sujetarnos o perseverar hasta el final de nuestras vidas. El Señor se encargará de que seamos santificadas a pesar de nuestros fracasos y defectos. La salvación es obra de Dios, no nuestra.

No me malinterpretes, tenemos un papel que jugar al elegir caminar en Sus caminos. Daremos cuenta de cómo vivimos. Nuestra santificación ho, y nuestra eternidad mañana es Su parte. Él es el Alfa y la Omega, el primero y el último, el principio y el fin. Él es quien finaliza el juego. ¡Amén!

Señor, gracias por Tu promesa de seguir trabajando en mí hasta el regreso de Cristo Jesús. Te alabo, puedo confiar en Ti por completo, que terminarás el trabajo que comenzaste en mí. Amén.