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Una Navidad Extraordinaria

DÍA 3 DE 25

El sueño de Jacob: Una piedra común se vuelve sagrada

Por Danny Saavedra

“Al despertar Jacob de su sueño, pensó: «Sin duda, el Señor está en este lugar y yo no me había dado cuenta». Y con mucho temor, añadió: «¡Qué asombroso es este lugar! ¡Es nada menos que la casa de Dios y la puerta del cielo!».’”—Génesis 28:16–17 (NVI)

Si alguna vez has acampado bajo un cielo estrellado, sabes lo tranquilo, solitario y humilde que puede sentirse. Justo ahí es donde encontramos a Jacob en Génesis 28. Pero, ¿cómo llegamos aquí?

Generaciones antes, Dios hizo un pacto con el abuelo de Jacob, Abraham. Dios le dijo a Abraham que a través de él bendecirá al mundo y que por su familia vendría el Redentor prometido. Aunque él y Sara eran viejos y no tenían hijos, por fe recibieron un hijo: Isaac.

Isaac creció y tuvo dos hijos gemelos, Esaú (el mayor) y Jacob. Jacob planeó quitarle la primogenitura a su hermano y engañó a su padre para recibir la bendición familiar. Cuando Esaú se enteró, juró matarlo, así que Jacob huyó. Ahí es donde lo encontramos ahora: un hombre agobiado por la ansiedad, durmiendo en el suelo duro con una piedra como almohada. Nada de esa noche se sentía sagrado ni pacífico. El mundo a su alrededor se había vuelto inestable e inseguro.

¿Te suena familiar, verdad? Con la ansiedad, la soledad y el estrés por las nubes, muchos sabemos lo que es estar en un desierto, desmoronándonos emocionalmente. Quizá tus lugares de siempre se han convertido en el escenario de noches sin dormir y preguntas sin respuesta. La historia de Jacob nos recuerda que incluso ahí, el cielo puede irrumpir.

Mientras Jacob dormía, vio una escalera que iba de la tierra al cielo, ángeles subiendo y bajando, y Dios mismo de pie arriba. El Señor repitió su promesa y le aseguró a Jacob su presencia. Cuando Jacob despertó, dijo: “Sin duda el Señor está en este lugar, y yo no me había dado cuenta.” ¡Lo que antes parecía un simple pedazo de tierra se volvió un lugar sagrado! Jacob llamó a ese lugar Betel, que significa “casa de Dios”.

Siglos después, Dios volvería a elegir un momento tumultuoso, una situación estresante y un lugar sencillo para que el cielo se encontrará con la tierra.

El momento: Israel del primer siglo, ocupada por los romanos, viviendo opresión e inestabilidad; una época en la que la esperanza era difícil de encontrar.

La situación: una virgen pobre y embarazada y su esposo carpintero, viajando por un censo sin tener dónde quedarse.

El lugar: un pequeño pueblo llamado Belén, un sitio llamado “pequeño entre los clanes de Judá” (Miqueas 5:2 NVI).

Y así como la noche cansada de Jacob se volvió un encuentro con Dios... en medio de ese momento tenso y situación estresante, Belén se convirtió en la puerta por la que el cielo tocó la tierra otra vez y le dio al mundo lo que más necesitaba: paz y esperanza a través del Redentor prometido al abuelo de Jacob.

Y así sigue viniendo Él. Dios nos encuentra no solo en nuestra fortaleza, sino también en nuestro miedo, y no solo en nuestros éxitos, sino en nuestro cansancio. Él entra en la ansiedad, la soledad y el caos y llena esos espacios con Su gloria. La misma Presencia que encontró a Jacob esa noche ahora nos encuentra en nuestros hogares, trabajos y desiertos. Y cuando lo hace, recordamos: “Sin duda el Señor está en este lugar.”

Ponlo en Práctica – Conecta

¡Dios nos creó para tener conexiones profundas! No importa cómo seas, no fuiste creado para vivir solo. Una parte esencial de ser más como Jesús es crear hábitos de conectar con su gente. Además, el mandamiento más importante fue resumido por Jesús como amar a Dios y amar a los demás. Hoy, practica amar a otros conectando de manera intencional. Ya sea que ayudes a lavar los platos con alguien en casa, juegues lo que tu hermano o compañero quiera, acompañes a un amigo en el trabajo o salgas a hacer un mandado con alguien, hoy sé presente con alguien en una tarea cotidiana.

Para la Familia

Idea Principal: Dios nos encuentra en nuestro miedo y convierte lugares comunes en tierra santa.

Pregunten Juntos:

  1. Cuando te sientas asustado o preocupado, ¿cómo puedes recordar que Dios está contigo justo donde estás?
  2. ¿Cuál es un lugar—como tu cuarto, el auto o la escuela—donde puedes parar y hablar con Dios esta semana?

Oración

Padre, gracias por encontrarte con Jacob en su miedo y por encontrarte conmigo en el mío. Cuando mi corazón se sienta ansioso o cargado, recuérdame que Tú estás cerca. Llena mi casa y mi mente con Tu paz y Tu presencia. Déjame ver Tu santidad en lo cotidiano y Tu poder en mi debilidad. En el nombre de Jesús. Amén.

Acerca de este Plan

Una Navidad Extraordinaria

Este devocional navideño de 25 días te invita a un viaje desde la esperanza hasta el Mesías, mientras dejamos que la verdadera historia de la llegada de Cristo transforme nuestros corazones. Cada día haremos una pausa, leeremos las Escrituras, reflexionaremos a la luz del evangelio y nos prepararemos no solo para una celebración, sino para el Dios extraordinario que lo cambia todo.

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Nos gustaría agradecer a Calvary Chapel Ft. Lauderdale por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: resources.calvaryftl.org/espanol