Una Navidad ExtraordinariaMuestra

El Dios que ve vino por mí
Por Samantha Rodriguez
“Como el Señor le había hablado, Agar le puso por nombre «El Dios que me ve», pues se decía: «Ahora he visto al que me ve».”—Génesis 16:13 (NVI)
“Entonces su padre Zacarías, lleno del Espíritu Santo, profetizó: «Bendito sea el Señor, Dios de Israel, porque ha venido a redimir a su pueblo. Nos envió un poderoso Salvador en la casa de David su siervo (como lo prometió en el pasado por medio de sus santos profetas), para liberarnos de nuestros enemigos y del poder de todos los que nos aborrecen; para mostrar misericordia a nuestros antepasados al acordarse de su santo pacto. Así lo juró a Abraham nuestro padre: nos concedió que fuéramos libres del temor al rescatarnos del poder de nuestros enemigos, para que le sirviéramos con santidad y justicia, viviendo en su presencia todos nuestros días.”—Lucas 1:67–75 (NVI)
¿Cómo dirías que se siente ser visto? Quizá para ti se siente un poco aterrador. No quieres que la gente sepa tus luchas y debilidades. O tal vez para ti se siente liberador. No te gusta sentirte olvidado o incomprendido. Al final del día, creo que todos queremos sentirnos vistos, pero la verdadera razón es porque queremos ser amados profundamente. Cuando alguien puede verte tal como eres y aun así te ama, ¡estás probando el amor divino de Dios en una relación humana! Pero ese amor solo se puede recibir de manera completa y perfecta de Dios mismo.
¿Y si te dijera que uno de los nombres de Dios es El Roi, el Dios que ve? ¿Qué te hace pensar eso? De hecho, este es el primer nombre específico que alguien le da a Dios en la Biblia. En Génesis 16, encontramos a una sierva llamada Agar huyendo de Abraham y Sara por el abandono y maltrato que estaba viviendo. Sara hizo que quedara embarazada de Abraham en un intento de acelerar o controlar el plan de Dios. En medio de su dolor, injusticia y sufrimiento, Dios se le aparece personalmente y le promete que tendrá muchos descendientes. Ella decide confiar, obedecer y adorarle porque Él la vio. Ella es la primera de la que se tiene registro que le dio este hermoso nombre a Dios, pero es un nombre que apunta a su fidelidad de ver a su pueblo una y otra vez.
Cuando Jesús vino al mundo, no llegó de una manera llamativa o espectacular. No hubo muchas personas que vieron y presenciaron su nacimiento, pero Dios decidió invitar a gente común y excluida para que vinieran y vieran. ¡Los pastores del campo fueron los primeros en escuchar y ver al Salvador recién nacido! Dios decidió verlos cuando nadie más lo hacía. De la misma manera, Jesús vino a la tierra porque vio nuestra necesidad de un Salvador.
Dios te ve en lo que puede parecer una situación sin esperanza y quiere que veas que Él te ha dado acceso a la libertad. ¡Puedes experimentar la redención porque El Roi te ve, y Él también envió a Jesús por ti!
Ponlo en Práctica: Ora
Orar es hablar con Dios. Puedes orar en cualquier lugar, ya sea en el coche, en tu cuarto o caminando en el súper. Puedes orar solo en silencio o con otras personas. Puedes orar en voz alta a Dios o escribir tus oraciones. Puedes arrodillarte, sentarte, caminar, lo que sea, y Dios estará ahí para escucharte y hablar contigo. Hoy, practica la oración pidiéndole a Dios que:
- Te muestre cómo te ve Él.
- Te dé ojos para ver a otros que necesitan esperanza hoy.
Para la Familia
Idea Principal: Porque Dios me ve, Él envió a Jesús para liberarme.
Pregunten Juntos:
- ¿Cómo te hace sentir saber que Dios te ve y sabe por lo que estás pasando?
- ¿Cuál es una forma en la que puedes ayudar a alguien más a sentirse visto y amado por Dios hoy?
Oración
Señor, ¡tú eres El Roi, el Dios que ve! Gracias por verme a mí y a todos. No solo me ves, sino que también me amas y cuidas de mí. Te pido que me ayudes a ver el mundo con tus ojos y a ser amable y valiente para ayudar a otros a verte también. Amén.
Escrituras
Acerca de este Plan

Este devocional navideño de 25 días te invita a un viaje desde la esperanza hasta el Mesías, mientras dejamos que la verdadera historia de la llegada de Cristo transforme nuestros corazones. Cada día haremos una pausa, leeremos las Escrituras, reflexionaremos a la luz del evangelio y nos prepararemos no solo para una celebración, sino para el Dios extraordinario que lo cambia todo.
More
Nos gustaría agradecer a Calvary Chapel Ft. Lauderdale por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: resources.calvaryftl.org/espanol
Planes relacionados

El Taller Del Artista: Redefiniendo Tu Identidad en Cristo

La Verdad De Dios

Descubriendo el propósito de mi vida

Encontrando a Jesús

De la prueba al propósito

ADVIENTO

Nacidos para vencer el pecado

Encuentros con Jesús que cambian nuestra vida

Naciendo en Un Pesebre
