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30 Días en Los Salmos

DÍA 1 DE 30

Día 1: Salmo 1 (Reina Valera 1960 es la versión utilizada a lo largo del Plan)

El Salmo 1 no es tanto una oración como una declaración de la realidad que subyace a todas las peticiones de los Salmos 3–150. Junto con el Salmo 2, funciona como una introducción a toda la colección; como el árbol frondoso y fructífero en su tercer versículo, el Salmo 1 extiende sus ramas sobre todo el libro. Presenta la vida “bendecida” o “feliz”—la vida buscada por los que oran y alaban a través de los salmos—en una serie de tres contrastes marcados entre “los justos” y “los malos”. Este retrato de “la buena vida” se entreteje en todo el salterio (otro nombre para el Libro de los Salmos).

El primer contraste es entre las elecciones de los justos y los malos (vv. 1–2). Los malos se llaman “pecadores” y “escarnecedores”—rehúsan caminar en las sendas de Dios y se burlan de sus instrucciones. En contraste, los justos (llamados “los piadosos” en algunas versiones) tienen otra orientación hacia los mandamientos de Dios. En primer lugar, “se deleitan” en ellos, tomando placer en las buenas instrucciones de un buen Dios. Segundo, “meditan” en ellos día y noche, prestando atención constante y reflexiva a la palabra de Dios.

El segundo contraste resalta las consecuencias de esas elecciones diferentes (vv. 3–4). Debido a su desprecio por las instrucciones de Dios, los malos son como “el tamo” que es esparcido por el viento. No hay solidez o estabilidad en sus vidas. Pero lo justos, los que se deleitan y meditan en la palabra de Dios, son como árboles saludables, fructíferos y lindos, que florecen en todo sentido.

Finalmente, los justos y los malos tienen destinos diferentes (vv. 5–6). El resultado final de una vida moldeada por el pecado contra los caminos de Dios es la incapacidad de estar parado en la asamblea del pueblo de Dios en la presencia de Dios. El camino que los malos han seguido desaparecerá o perecerá, pero “el camino de los justos” está bajo la mirada del buen Dios y perdurará.

¡Hoy es un buen día para practicar deleitarte en la palabra de Dios y meditar en ella!

Escrituras

Acerca de este Plan

30 Días en Los Salmos

La mayoría de las Escrituras son la palabra de Dios dada a los seres humanos, pero el Libro de los Salmos registra palabras humanas dirigidas a Dios. Estas oraciones y canciones muestran a personas de fe decididas a mantenerse conectadas a Dios sin importar sus circunstancias. La confesión, el lamento, el ruego, la acción de gracias, la alabanza—todos los elementos de nuestra relación con Dios están presentes. Los 150 salmos se dividen en cinco “libros”; durante estos 30 días, vamos a contemplar y orar seis salmos de cada libro. Todos dirigirán nuestra mirada al Dios que nos ama.

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Nos gustaría agradecer a One Mission Society por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: onemissionsociety.org