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Oraciones poderosas

DÍA 6 DE 14

ORACIONES CON PALABRA.

Hay una cosa que hace poderosa una oración y es orar con Palabra. En la Biblia tenemos numerosos cánticos, himnos y oraciones de personajes y profetas, tenemos versículos que podemos utilizar para profundizar en la oración e, incluso, para alejar el mal de ti.

Ejemplos de oraciones que me parecen super inspiradoras es, entre otras, la de Jonás en Jonás capítulo 2:

“Invoqué en mi angustia a Jehová, y él me oyó;

Desde el seno del Seol clamé,

Y mi voz oíste.

Me echaste a lo profundo, en medio de los mares,

Y me rodeó la corriente; Todas tus ondas y tus olas pasaron sobre mí.

Entonces dije: Desechado soy de delante de tus ojos;

Mas aún veré tu santo templo.

Las aguas me rodearon hasta el alma,

Rodeome el abismo;

El alga se enredó a mi cabeza.

Descendí a los cimientos de los montes;

La tierra echó sus cerrojos sobre mí para siempre;

Mas tú sacaste mi vida de la sepultura, oh Jehová Dios mío.

Cuando mi alma desfallecía en mí, me acordé de Jehová,

Y mi oración llegó hasta ti en tu santo templo.

Los que siguen vanidades ilusorias,

Su misericordia abandonan.

Mas yo con voz de alabanza te ofreceré sacrificios;

Pagaré lo que prometí.

La salvación es de Jehová” (RVR1960).

Otras de las más inspiradoras oraciones de la Biblia podría ser Nehemías 1:5-11: “Y dije: Te ruego, oh Jehová, Dios de los cielos, fuerte, grande y temible, que guarda el pacto y la misericordia a los que le aman y guardan sus mandamientos; esté ahora atento tu oído y abiertos tus ojos para oír la oración de tu siervo, que hago ahora delante de ti día y noche, por los hijos de Israel tus siervos; y confieso los pecados de los hijos de Israel que hemos cometido contra ti; sí, yo y la casa de mi padre hemos pecado. En extremo nos hemos corrompido contra ti, y no hemos guardado los mandamientos, estatutos y preceptos que diste a Moisés tu siervo. Acuérdate ahora de la palabra que diste a Moisés tu siervo, diciendo: Si vosotros pecareis, yo os dispersaré por los pueblos; pero si os volviereis a mí, y guardareis mis mandamientos, y los pusiereis por obra, aunque vuestra dispersión fuere hasta el extremo de los cielos, de allí os recogeré, y os traeré al lugar que escogí para hacer habitar allí mi nombre. Ellos, pues, son tus siervos y tu pueblo, los cuales redimiste con tu gran poder, y con tu mano poderosa. Te ruego, oh Jehová, esté ahora atento tu oído a la oración de tu siervo, y a la oración de tus siervos, quienes desean reverenciar tu nombre; concede ahora buen éxito a tu siervo, y dale gracia delante de aquel varón. Porque yo servía de copero al rey” (RVR1960).

Luego hay capítulos poderosos que nos puede servir para orar y pedir protección como es la armadura de Dios de Pablo, en Efesios 6:10-20: “Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza. Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo. Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes. Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y habiendo acabado todo, estar firmes. Estad, pues, firmes, ceñidos vuestros lomos con la verdad, y vestidos con la coraza de justicia, y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz. Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno. Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios; orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos; y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio, por el cual soy embajador en cadenas; que con denuedo hable de él, como debo hablar” (RVR1960).

Bendito sea el Dios Altísimo por los siglos de los siglos, amén.

ORACIÓN.

Bendito Padre, la Palabra dice que perseveremos en la oración, por lo que voy a alabarte y bendecirte en esta oración, en este perfume que derramo para glorificar el nombre de Jesús.

Perdono a todo aquel que me ofenda porque me sale del corazón hacerlo y la Palabra me enseña que hay que perdonar al que peque contra mí hasta setenta veces siete. Eres grande en misericordia y tardo para la ira, Señor, pero insisto en que me perdones por si he pensado, hecho o dicho algo que no es de tu agrado.

La salvación es de Jehová, tal y como decía Jonás en su oración, y estoy eternamente agradecido de que me justifiques a través de Jesucristo por la cruz y por su preciosa sangre, que me expía de los pecados.

Bendito sea Jehová para siempre, amén y amén.

Acerca de este Plan

Oraciones poderosas

Una de las cosas que tenemos que hacer según la Biblia es "perseverar en la oración". No es algo que sea metódico tan sólo, tampoco es algo en vano: nos permite acercarnos a Dios. Es incluso nuestra arma, nuestra esperanza, nuestra manera de comunicarnos con Él y nuestra esencia en la fe. En este plan podemos ver distintas formas de orar, oraciones de profetas y personas de la Biblia y qué clases de oración hay. Te invito a acercarte a Dios más aún. Bendito sea Dios por los siglos de los siglos, amén.

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Nos gustaría agradecer a Alejandro Barón Fuertes por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: www.facebook.com/profile.php?id=61550747693539