Principios Para La Vida en El Reino De DiosSample

EL PODER DE LA FE

IDEAS BÁSICAS

• Se suponía que la tormenta en el mar aumentaría la confianza de los discípulos en Jesús y los alentaría a confiar en Dios, incluso si se desencadenaban las fuerzas de la naturaleza. Dios es el Maestro absoluto y tiene autoridad sobre ellos. En tales situaciones, Él está presente, y debemos actuar basados en la fe, no en el miedo.

• La reacción humana a la obra de Satanás en la vida de otros es excluir, aislar y abandonar a esas personas.

• La autoridad de Jesús sobre los demonios es incuestionable; lo conocían y testificaban de Jesús como el Hijo de Dios. Lamentablemente, algunas personas ni siquiera tienen tal creencia.

• Para la población local, los cerdos eran más importantes que sus semejantes. Así que le pidieron a Jesús que abandonara su ciudad, y él se fue, porque Jesús se queda solo donde se le quiere.

• Sin embargo, se le deja en su comunidad para ser un testimonio vivo de la obra de Dios.

Por el milagro de calmar la tormenta, Jesús quiso que sus discípulos aumentaran su fe, entendiendo que Él también es Maestro de la naturaleza, y que deben saber esto y confiar en Dios. En circunstancias de peligros naturales o desastres, aunque parezca que Jesús está “durmiendo al timón”, Él no está desinteresado, sino que espera que actuemos por fe en Su nombre. La fe, no el miedo, debe tomar el control de nosotros en tales situaciones. Lo triste es que los ciudadanos de esta localidad no pudieron hacer frente a la liberación del afligido, ya que perdieron a sus cerdos. El problema universal de los humanos parece ser la falta de comprensión del valor de un alma en relación con los valores materiales fugaces. El valor de un alma es mayor que el valor del cielo y la tierra, porque el alma es eterna, mientras que el cielo y la tierra pasarán. ¡¿Cómo podemos comparar el valor de un alma con el de una manada de cerdos?! Debemos entender que necesitamos a Jesús y su sacrificio. Cualquier otra actitud es injustificada.
Él pagó el precio de nuestro perdón y aseguró nuestra salvación, y si venimos a Él con reclamos, tenemos todas las posibilidades de quedarnos con nuestros reclamos, como los de la ciudad de Gadar. ¡Cuánto tenían que ganar los lugareños con esto, si entendían la perspectiva del Reino y el valor de las cosas espirituales!