Una vida de intimidad con DiosSample

Dios no acepta cualquier ofrenda
“Dijo David... yo no puedo ofrecerle a Dios algo que no me haya costado...”, 2º Samuel 24:16-25 (TLA).
Una ofrenda sin sacrificio no es verdadera adoración. Abraham conocía este principio espiritual, Génesis 22:5. Ana, la mamá de Samuel también: “Y Ana... crió a su hijo... Después, lo llevó...a la casa del Señor... ¡Para siempre será del Señor!”. Y allí adoró al Señor”, 1º Samuel 1:23-28 (RVC). Y David da muestra de lo mismo.
Solemos decir en los cultos: “vinimos a adorar” y lo único que le ofrecemos a Dios son canciones apáticas, sin pasión ni devoción sincera. Alentamos a las personas a que dediquen alguna ‘horita’ para el servicio al Señor, cuando Dios es digno de recibir mucho más que eso. ¡No especules con el tiempo o el servicio que le das a Dios! Entrégale lo mejor, pues no es un mendigo que se agrada de cualquier servicio, como si fuera un favor que le hacemos.
Cuántas veces hemos oído en las iglesias: “si usted está por primera vez no se sienta en la obligación de darle a Dios”. ¡Qué deshonra! Mejor sería que le dijéramos: “siéntase con la carga de darle lo mejor”. Otra frase muy conocida es: “si usted no tiene para ofrendar no se haga problema”. Nadie es tan pobre como para no darle algo a Dios.
Según la Biblia nuestro servicio es una ofrenda: “Ustedes confían en Dios y le sirven, y eso es como si le presentaran una ofrenda”, Filipenses 2:17 (TLA). Pecamos cuando le ofrecemos a Dios cosas que no nos cuestan, lo servimos de mala gana o buscando algún interés personal.
Ofendemos al Señor cuando damos la falsa imagen de que Él acepta cualquier servicio u ofrenda. Decimos: “es mejor que nada” y dejamos que cada quien deshonre a Dios según le plazca. Hay quienes caminan cuarenta kilómetros en sacrificio por sus ídolos y nosotros no estamos dispuestos a cruzar la calle para pastorear una vida. Romanos 12:1 dice: “Entreguen toda su vida como sacrifico vivo a Dios... Esa ofrenda que es su vida debe estar dedicada solamente a Dios para poder agradarle. Esta clase de adoración es la que realmente tiene sentido”, PDT.
“Amado Señor, perdóname por las veces que acudí a los cultos sin expectativas; que dije adorarte cuando en realidad mi mente estaba en otro sitio. Hoy reconozco mi pecado y quiero comenzar un nuevo tiempo para darte adoración con mi vida, mi tiempo, mi consagración y mi sacrificio. Amén”.
About this Plan

Cada día es una oportunidad para experimentar la presencia del Señor. Dios mismo es quien te extiende la dulce invitación para el encuentro santo: "Mi corazón te ha oído decir: «Ven y conversa conmigo». Y mi corazón responde: «Aquí vengo, SEÑOR»" (Salmo 27:8).
More
Related Plans

Slaying Giants Before They Grow

Film + Faith - Parents, Family and Marriage

The Bridge Back to God

Self-Care

NOAH: A Message of Faithfulness

Live Well | God's Plan for Your Wellbeing

Forever Forward in Hope

A New Kind of Family

Just Read It: The Forgotten Secret That Changed a King’s Life Can Change Yours
