Bástate Mi Gracia: Un Estudio Sobre 2 Corintios 12Sample

# Las cosas no siempre son lo que parecen "Y para que la grandeza de las revelaciones no me exaltase desmedidamente, me fue dado un aguijón en mi carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, para que no me enaltezca sobremanera" (2 Corintios 12:7). ¿Qué es un aguijón en la carne? Cuando pensamos en un aguijón, pensamos en una molestia menor. Pero la raíz de la palabra que Pablo usó para aguijón aquí describe una estaca para tienda de campaña, no una tachuela. En la traducción griega antigua del Antiguo Testamento conocida como la Septuaginta, la palabra skolops (aguijón) indica “algo que frustra y causa problemas en la vida de los afligidos” (Dr. Colin Kruse). “Me fue dado un aguijón en mi carne, un mensajero de Satanás que me abofetee”. De una manera extraña, el aguijón había sido dado –dado por Dios– pero también era un mensajero de Satanás. Probablemente Satanás aprovechó el permiso de Dios para afligir a Pablo y lo hizo con malicia hacia el Apóstol. Pero Dios tenía un propósito en todo ello y permitió que el mensajero de Satanás impidiera con éxito que Pablo se enalteciera en sobremanera. “Que me abofetee” significa que este aguijón en la carne –el mensajero de Satanás– “golpeó” a Pablo. El Apóstol sentía que estaba siendo golpeado a diestra y siniestra por este mensajero de Satanás ¿Pablo, golpeado por el diablo? ¿Quién lo hubiera pensado? Alan Redpath lo explicó así: “Tal vez has mirado el rostro de un cristiano que siempre está sonriendo, que nunca parece tener ninguna preocupación, que siempre está feliz y radiante, y al pensar en tus propias circunstancias has dicho en tu corazón: "¡Cómo quisiera ser él! Parece que no tiene problemas. No tiene que soportar lo que yo sí. Pero quizás has vivido lo suficiente, como yo, para saber que a veces el rostro más radiante esconde grandes presiones, y que a menudo el hombre que está siendo el más bendecido por Dios es el más abofeteado por el diablo”. #### Invitación: ¿Te has sentido alguna vez como el “saco de boxeo” de Satanás? No temas. Sigue confiando en el Señor. Dios es escudo a tu alrededor (Salmo 3:3) y nunca te abandonará (Hebreos 13:5-6). Basado en el Comentario Bíblico de Enduring Word de David Guzik.