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La Biblia con Nicky y Pippa Gumbel 2021Sample

La Biblia con Nicky y Pippa Gumbel 2021

DAY 211 OF 365

### Gobierno: ¿Divino o Demoníaco? Políticos: ¿cómo los tratamos? Gobiernos y consejos locales: ¿cómo los vemos? Impuestos: ¿realmente necesitamos pagarlos? ¿Y los regímenes malvados? Si vives bajo un Hitler o Stalin, ¿se supone que debes obedecerlos? «Sé un buen ciudadano», escribe el apóstol Pablo. En palabras de The Message : «Todos los gobiernos están bajo la autoridad de Dios. En la medida en que hay paz y orden, es el orden de Dios. Así que, vive como un ciudadano responsable. Si eres irresponsable con el Estado, entonces serás irresponsable con Dios, y Dios te reclamará tu responsabilidad. Las autoridades debidamente constituidas son solo una amenaza si estás intentando algo. Los ciudadanos decentes no tienen nada que temer» (Romanos 13:1-3, MSG). Esta tuvo que ser una idea radical para los lectores originales de Pablo. En el mundo antiguo, la mayoría de la gente vinculaba la religión con el gobierno. La iglesia primitiva aún estaba haciéndose a la idea de que el Mesías no iba a gobernar sobre su pueblo en un gobierno terrenal. Aquellos que los rodeaban adoraban a Roma y al emperador como a un dios. Pero aquí, Pablo les dice que sigan a Jesús como su Rey y también se sometan a la autoridad romana. La enseñanza de Pablo en Romanos capítulo 13 necesita ser contrapesada por Apocalipsis capítulo 13. El libro de Apocalipsis capítulo 13 fue escrito en el tiempo de la persecución a los cristianos bajo el emperador Domiciano. El Estado es visto como el aliado del diablo —representado como un dragón rojo— que ha dado su autoridad al Estado perseguidor que es representado como un monstruo emergiendo del mar. En el peor de los casos, el gobierno puede ser demoníaco. Tanto lo escrito en Romanos 13, como en Apocalipsis 13, es verdad. Hay buenos y malos gobiernos. Hay un lado bueno en el gobierno humano; también puede haber un lado malo. Como observa Oscar Cullmann, si «el Estado permanece dentro de sus límites o si los transgrede; el cristiano lo describirá como siervo de Dios o como instrumento del diablo». ### Salmos 89:38-45 ## 1\. Ora por los que tienen autoridad Israel era una teocracia. La iglesia y el Estado estaban inextricablemente entrelazados. El líder «ungido» del pueblo de Dios (v.38) también era el que llevaba la «corona» (v.39) y se sentaba en el «trono» (v.44). Los reyes del Antiguo Testamento fueron vistos como ungidos por Dios. Sin embargo, muchos de ellos pecaron y fueron infieles al Señor. El salmista escribe: «Pero tú has desechado, has rechazado a tu ungido; te has enfurecido contra él en gran manera. Has revocado el pacto con tu siervo; has arrastrado por los suelos su corona» (vv.38-39). > Señor, oro por mi gobierno y por todos los demás líderes de mi nación. Oro para que nunca se cubran de vergüenza. Que gobiernen bien y sabiamente. ### Romanos 13:1-14 ## 2\. Disfruta de la libertad bajo la autoridad Vivimos en la era entre la primera y segunda venida de Jesús. Cuando Jesús regrese gobernará y reinará para siempre, no habrá necesidad de gobierno humano. Mientras tanto, sin embargo, necesitamos del aquel. La autoridad de los gobiernos es propiamente vista, en palabras de San Pedro, como una «autoridad humana» (1 Pedro 2:13). Esto no significa que los seres humanos lo idearon independientemente o aislados de Dios; más bien, es una institución implícita a la existencia social humana como la hizo Dios. Sin embargo, puesto que es Dios quien establece las reglas, San Pablo escribe que todos debemos someternos a las autoridades públicas (Romanos 13:1-2). Si esto se aplica a la autoridad secular, ¿cuánto más debe aplicarse a la autoridad de la iglesia? Las diferentes iglesias tienen diferentes estructuras de autoridad. En mi experiencia, someterme a la autoridad de los líderes de nuestra iglesia ha traído gran libertad. Este es el principio básico del Nuevo Testamento. Debemos obedecer a todas las autoridades: al gobierno, a las autoridades locales y a las instituciones donde pertenecemos. ¿Por qué? * En primero lugar, lo hacemos porque son parte de la autoridad que es instituida por Dios. * Segundo, lo hacemos por las consecuencias que trae el no obedecerles: «Las autoridades están al servicio de Dios para tu bien; pero si estás haciendo algo malo, por supuesto que deberías tener miedo, porque ellas tienen poder para castigarte. Están al servicio de Dios para cumplir el propósito específico de castigar a los que hacen lo malo» (v.4, NTV). * En tercer lugar, «por razones de conciencia» (v.5). Si no estamos obedeciendo a las autoridades, no podemos vivir con una conciencia limpia. «Así que es necesario someterse a las autoridades no solo para evitar el castigo, sino también por razones de conciencia» (v.5). Vemos aquí una distinción clara entre la moralidad personal y la aplicación de la ley por el gobierno. En el campo de la moralidad personal, la enseñanza de Pablo es muy similar a la de Jesús: es acerca de la no-represalia y de «poner la otra mejilla» (12:14-21). Sin embargo, continua predicando acerca de «las autoridades públicas» (13:1-6). Habla de los gobernantes como siervos de Dios para castigar al malhechor (v.4). El Estado se preocupa por la protección de los demás. Respaldar y permitir el asesinato y la violencia sería poco amable y nada cristiano. Por analogía, si está bien que las autoridades utilicen la fuerza para proteger a los ciudadanos de las amenazas internas; es razonable protegerlos de las fuerzas externas, si es necesario. En la práctica, por supuesto, a menudo es extremadamente difícil discernir cuándo está justificado el uso de la fuerza. Lo que genera menos controversia es que debemos pagar lo que debemos (vv.6-8). Esto significa pagar cada centavo de los impuestos que debemos y de todas nuestras deudas tan pronto como lleguen: «Paguen a cada uno lo que le corresponda: […]. No tengan deudas pendientes con nadie» (vv.7-8). No está mal tener una deuda planificada y manejable: una hipoteca, un préstamo estudiantil o una tarjeta de crédito. Sin embargo, debemos evitar tener deliberadamente una deuda imprevista o inmanejable. Si tenemos deudas, es importante no ignorarlo y conseguir ayuda tan pronto como sea posible; por ejemplo, conseguir asesoramiento sobre cómo manejar las deudas en algún servicio de asesoramiento cristiano. El camino para cumplir la ley es amar a tu prójimo como a ti mismo. «De hecho, quien ama al prójimo ha cumplido la ley» (v.8b). Si hacemos esto no robaremos por no causar infelicidad a la persona a quien robamos, no mataríamos o ni siquiera sentiremos ira de la mala debido al daño que causaríamos a otros. No cometeríamos adulterio por el daño que haríamos al matrimonio y a las relaciones. «Porque los mandamientos que dicen: “No cometas adulterio”, “No mates”, “No robes”, “No codicies”, y todos los demás mandamientos, se resumen en este precepto: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”. El amor no perjudica al prójimo. Así que el amor es el cumplimiento de la ley» (vv.9-10). La ley se resume y se cumple con el amor. El amor no es una excusa para quebrantar los mandamientos sino una manera de guardarlos. Los mandamientos fueron dados por amor a nosotros y se cumplen con  amor. Pablo no escribe que si amas no necesitas obedecer los mandamientos. Más bien, él asegura que si amas, cumplirás los mandamientos. Jesús es el ejemplo supremo del amor. Pablo nos exhorta: «Revístanse ustedes del Señor Jesucristo» (v.14). Ora para que el carácter de Jesús —su amor— te rodee y te proteja y que las personas que encuentres hoy lo noten. > Señor, quiero revestirme del Señor Jesucristo y no preocuparme por satisfacer los deseos de la naturaleza pecaminosa (v.14). Oro para que el amor de Jesús se vea en mí hoy. ### 1 Crónicas 7:1-9:1a ## 3\. Ten en cuenta los límites de la autoridad Al mirar alrededor del mundo hoy en día, vemos buenos y malos liderazgos y gobiernos. El pueblo de Israel tenía su cuota de mal gobierno. A medida que el cronista concluye sus listas y genealogías, escribe: «Todos los israelitas fueron registrados en las listas genealógicas e inscritos en el libro de los reyes de Israel. Por causa de su infidelidad a Dios , Judá fue llevado cautivo a Babilonia» (9:1). En su lista menciona a Saúl: «Quis, y este fue padre de Saúl, quien fue padre de Jonatán» (8:33), a quien más tarde pondrá de relieve como ejemplo de alguien que empezó como un buen gobernador pero que terminó siendo malo (10:13-14). Saúl se convirtió en un ejemplo del tipo de gobierno del cual se habla en Apocalipsis capítulo 13. No obstante, David buscó permanecer leal y sujeto a su autoridad en la medida de sus posibilidades. > Señor, ayúdanos a tener la actitud correcta frente a todos aquellos a quienes pusiste como autoridad sobre nosotros (ya sea en la iglesia o en el Estado). Ayúdanos a someternos con buena voluntad incluso cuando no estemos de acuerdo. Ayúdanos también a tener la sabiduría para saber cuándo hemos llegado al límite. ### Pippa Adds «… pónganse la armadura resplandeciente de la vida recta» ( Romanos 13:12, NTV) #### References Nueva Versión Inernacional (NVI) Copyright © 1999 by Biblica, Inc

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