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Mas Amando a Dios con la MenteMuestra

Mas Amando a Dios con la Mente

DÍA 2 DE 12

Nuestra máxima autoridad

Nuestro concepto de las Escrituras afirma que la Biblia es el estándar supremo de conocimiento. Nos dice qué pensar, pero también cómo pensar, por qué y cuándo. Proporciona las normas para la vida y la fe. Enseña sabiduría para navegar por las complejidades de la existencia.

La Biblia es revelación de Dios. Es su voz la que nos habla. Exige toda nuestra atención. Requiere nuestra completa obediencia. Es la revelación de la mente de Dios con respecto a la creación. Dice qué es real y cómo responder correctamente.

Consideren esta breve ilustración. En el Antiguo Testamento, la afirmación central del credo se llama el Shemá de Deuteronomio 6:4–5. Dice, “Escucha, oh Israel, el Señor es nuestro Dios, el Señor uno es. Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu fuerza.”

El Shemá es un ejemplo de la dinámica indicativo-imperativo en la Biblia. Hay tres partes de esta fórmula: una declaración indicativa, que es una declaración de verdad o hecho (el indicativo); un "por lo tanto" literal o lógicamente implícito, que apunta a la respuesta adecuada; y luego, la aplicación o mandato (el imperativo).

En este caso, el indicativo se encuentra en el versículo 4, “Escucha, oh Israel, el Señor es nuestro Dios, el Señor uno es.” El imperativo es el versículo 5, “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu fuerza.” (La inferencia lógica, "por tanto", entre los versículos 4 y 5, está implícita).

El Shemá nos dice en qué consiste la realidad. Primero, hay un creador absoluto y soberano, que es el Señor nuestro Dios, y que sólo él es. No hay otro. Y segundo, hay una relación entre el creador y la criatura: un pacto Señor-siervo. Esto significa que debemos dedicar todo nuestro ser a su honor y servicio, que él nos comunica a través de la Biblia. Específicamente, nuestra máxima autoridad, "el Señor nuestro Dios", nos ordena dedicar nuestras mentes y motivos, así como nuestros talentos y recursos para glorificarlo y bendecir a los demás.

En este pasaje, por lo tanto, se nos dice que la respuesta adecuada a Dios es la devoción total en pensamiento, deseo y comportamiento. Dios se comunica con nosotros con autoridad, y debemos escuchar y obedecer por lo que él es (creador) y lo que somos nosotros (siervos).

Acerca de este Plan

Mas Amando a Dios con la Mente

"AMARÁS AL SEÑOR TU DIOS CON TODO TU CORAZÓN, Y CON TODA TU ALMA, Y CON TODA TU MENTE, Y CON TODA TU FUERZA". Jesús citó Deuteronomio 6:5 con respecto al "mandamiento más importante". Este es el segundo plan de una serie en la que aprenderás qué es amar a Dios con la mente por qué esto es tan importante y cómo hacerlo mejor.

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Nos gustaría agradecer a Richard Smith por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: www.centrokuyper.com