Esperanza y ConfianzaSample

Tres cosas permanentes:

Dice en 1 Corintios 13:13 (DHH):

“Tres cosas hay que son permanentes: la fe, la esperanza y el amor; pero la más importante de las tres es el amor".

De todo lo que hemos estado estudiando, llegamos a la misma conclusión que Pablo expresa en esta cita: hay tres cosas que no se moverán. Todo puede cambiar —vivimos en un mundo en constante transformación— pero solo estas tres cosas seguirán siendo permanentes: la confianza en Dios, que es fe; la seguridad de que cumplirá sus promesas, que es esperanza; y el amor.

De estas, la más importante es el amor, porque, según 1 Juan 4:16, Dios es amor. No se trata del amor pasional que se ve en las películas, sino del amor que se manifiesta en el perdón, la misericordia y la compasión.

Es cuando este amor se perfecciona en nosotros que realmente aprendemos a amar, a tener paz, a afirmarnos en la esperanza. También en ese momento, como creyentes y seguidores de Jesús, llegamos a una satisfacción profunda, expresada en alegría, porque descansamos en el poder de Dios, no en nuestras propias fuerzas ni en nuestras capacidades.

En ese punto comprendemos que todo aquello de lo que antes nos vanagloriábamos —logros personales, éxitos, reconocimientos— pierde importancia. Entonces descubrimos la verdadera alegría que nace de la confianza en Dios, la certeza de que Él cumplirá sus promesas, y el amor inagotable que tiene por nosotros.

Oración sugerida

Señor, gracias por recordarme hoy que, aunque todo cambia a mi alrededor, tu amor, tu fidelidad y tus promesas son permanentes. Enséñame a vivir con fe, a esperar con esperanza, y a amar como Tú amas. Que mi alegría no dependa de mis logros, sino de tu presencia constante en mi vida. Amén.

Para poner en práctica

1. Haz una lista de las cosas que han cambiado en tu vida recientemente. Luego escribe junto a ellas cómo Dios ha permanecido fiel en cada etapa.

2. Recita cada mañana esta verdad: “La fe, la esperanza y el amor permanecen; y el mayor de ellos es el amor".

3. Muestra amor intencionalmente hoy: perdona, escucha con compasión, o ayuda a alguien sin esperar nada a cambio.

4. Medita en 1 Juan 4:16 y pídele al Espíritu Santo que perfeccione su amor en ti cada día.