Un Paso MásSample

Ser parte
Jesús al ser hombre también fue un ser social. Estuvo rodeado de Su familia, gente de la sinagoga, Sus discípulos, y de multitudes donde había diferentes clases sociales. En los 3 años de ministerio público de Jesús, Él formó Su comunidad, no solo con Sus discípulos y familia sino también con mujeres, niños/as y marginados/as de la sociedad donde todos/as pudieron sentir y tener la seguridad de pertenecer a un lugar pero también de identificarse con alguien.
Como observábamos en los dos últimos días, Jesús antes de ascender a los cielos les dijo que esperen al Espíritu Santo. Toda Su comunidad (eran como 120 personas) le obedecieron y se fueron a Jerusalén a esperar donde estaban todos juntos y unidos. Así comenzó la primera comunidad de fe donde hoy la solemos llamar iglesia, parroquia, congregación, familia, capilla, cuerpo de Cristo, etc.
Esta comunidad que describe el libro de Hechos nos demuestra la importancia de estar juntos y unidos, de estar reunidos en un mismo lugar, de vernos cara a cara, de hablar, de abrazarnos, de compartir lo bueno y lo malo, de crecer juntos en la fe pero también en lo personal y en nuestro futuro. Esta comunidad nos da un sentido de pertenencia e identidad que se centra en alguien y no en algo, y ese alguien es Cristo.
Pero también en algunas cartas del Nuevo Testamento se nos explica que esta comunidad no es perfecta, por eso nos aclara cómo debemos actuar: teniendo amor por sobre todo, perdonándonos, siendo pacientes, soportándonos unos a los otros, siendo compasivos, hablando bien y verdad, y la lista sigue.
Esta comunidad no es perfecta porque tú y yo no lo somos, pero Jesús sí, y Él quiere que cada miembro nos parezcamos a Él, que seamos “pequeños Cristos”. Nos da un lugar de pertenencia y seguridad como también una nueva identidad.
¿Te animas a pertenecer e identificarte a una comunidad de fe?
Te animo a hablar con el Espíritu Santo y decirle…
“Espíritu Santo, ayúdame a encontrar mi comunidad de fe para seguir creciendo en conocer más a Jesús pero también, para poder conocer a otras personas que te aman y se identifican Contigo. Sé que no estoy sola/o porque Tú, Espíritu de Dios estás a mi lado, sé que hay una iglesia o parroquia a la que pertenezco y quiero participar para estar junto a ellos y ellas. Amén”.
About this Plan

Deseamos que sigas creciendo y experimentando el amor de Dios en todas sus formas. Por eso a través de este plan, queremos ayudarte a profundizar tu fe para conocer más a Jesús por medio del Espíritu Santo.
More
Related Plans

Essentials for the New Year

A Thrill of Hope

The God of Times and Seasons

Prayer: From Natural to Supernatural

Waiting for (Christ)mas

The Holy Spirit

Washed by the Word (New Testament)

In Every Season: Trusting God in Life’s Transitions

Kingdom Marriages: A 5-Day Plan to Build a Christ-Centered Relationship
