Vas Por El Camino CorrectoSample

Su camino, mi camino.

No existe una libertad mayor que entregar nuestra voluntad a Dios al 100 por ciento. A veces decimos que le hemos entregado a Él nuestra voluntad, pero te invito a preguntarte esto: ¿realmente has entregado a Dios tu voluntad? o estás disfrazando tus propios deseos con frases como “Dios me dijo” o “siento en mi corazón”.

En cierta ocasión experimenté esta pregunta de parte del Espíritu Santo y golpeó profundamente mi espíritu, ya que por años hice mi voluntad disfrazada de la voluntad de Dios. Cuando rendimos todo a Dios poniendo Sus sueños sobre los nuestros, es ahí donde demostramos realmente nuestro amor. El camino de Jesucristo puede no ser el más sencillo pero es el único que salva y que nos revela al Padre.