Decídete a Vivir - Viaje 4: CambioSample

Día Siete: Siendo Empoderados “Todos fueron llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en diferentes lenguas, según el Espíritu les concedía expresarse” – Hechos 2:4, NVI ESCUCHA Si alguien toca una guitarra eléctrica desconectada, difícilmente la escucharías. Sin embargo, si la conectas a un gran amplificador y pones el volumen al máximo, ¡puedes llegar a entretener a un estadio lleno de gente! ¡Dios quiere que conectemos nuestras pequeñas vidas al poder de Su Espíritu! Cuando esto suceda, nuestro impacto en nuestro mundo será mucho mayor que si intentáramos hacerlo con nuestras propias fuerzas. Nuestra inteligencia y determinación no son suficientes para hacer una diferencia; necesitamos orientación, audacia y energía dadas por el Espíritu para tener éxito. APRENDE · Dios nos promete un regalo – el Espíritu Santo (1:4-5) · Cuando somos salvos, somos nacidos del Espíritu (Juan 3:5) · Dios también quiere llenarnos con su Espíritu (Hechos 2:4) · Para que podamos experimentar su presencia y su poder (2:2-4) · Y audacia para ser sus testigos (1:8) Empoderados por el Espíritu, ministraremos de una manera tan efectiva que las vidas serán transformadas. Podemos comenzar fijándonos en personas que ya conocemos (v8), pero con el deseo de alcanzar a las personas, culturas y aún lugares desconocidos. ¿Cómo nos llena? Jesús dijo que necesitamos venir sedientos por Él, pidiendo confiadamente ser llenos por su Espíritu (lee Juan 7:37-39). Así de maravillosos como pueden ser los encuentros con Dios en lo alto de las montañas, Dios quiere que seamos llenos todos los días (Efesios 5:18) Esto solo es posible cuando le damos al Espíritu control total de nuestras vidas todos los días, tanto cuando nos sentimos cerca de Dios, como cuando sentimos que Él está muy lejos de nosotros. VIVE · ¿Puedes pensar en los momentos en que sentiste la presencia del Espíritu Santo o que tal vez Él te estaba usando? · Hazte un tiempo para estar a solas hoy, para acercarte con sed a clamar a Jesús y recibir la llenura del Espíritu.