Persiguiendo La VerdadSample

Diestros en la guerra
1 Crónicas 5:18-20

Estas tribus estaban preparadas para la batalla y participaban activamente en la guerra contra sus enemigos. Aunque hoy no somos parte de un ejército, ciertamente debemos estar adiestradas para la guerra y listas para luchar. La batalla que libramos no es física, sino espiritual. Tal vez nuestro deseo es que el enemigo de nuestra alma no nos perturbe, llevar una vida tranquila llena de paz y sin dificultad. Sin embargo, por mucho que anhelemos eso, la batalla espiritual es una realidad para nosotros hoy.

Las buenas noticias para nosotras es que, al igual que estas tres tribus, no peleamos solas nuestras batallas. Como ellos, necesitamos adiestrarnos y prepararnos. Nuestra preparación no es física, sino a través del estudio de la Palabra, mediante la oración y la adoración, y el discernimiento espiritual. Al andar de esta manera, estaremos preparadas para la batalla cada vez que la enfrentemos.

Primera de Crónicas 20 revela una verdad que nos anima hoy. En medio del combate, cuando los rubenitas, gaditas, y los de la media tribu de Manasés necesitaron ayuda, clamaron a Dios: «Por cuanto confiaban en Dios, … Dios los ayudó» (v. 20, NVI). Cumplieron su deber al prepararse, pero ellos reconocieron que Dios era su respuesta, su fortaleza, y su victoria contra el enemigo. Así mismo, Dios es nuestra fortaleza y nuestra victoria con el enemigo. Preparémonos fielmente, pero confiemos en Dios para obtener la victoria.