Reflexiones Bíblicas NavideñasMuestra

REFLEXIÓN

Dios es experto en tomar lo sencillo, lo aparentemente sin valor, para hacer cosas maravillosas y cumplir sus planes perfectos en medio nuestro. Esta profecía habla del lugar del nacimiento de Jesús, un pequeño pueblo sin mayor influencia en la región. Sin embargo, fue la ciudad escogida por Dios para que naciera el Salvador del mundo. Cuando los sabios que venían del oriente llegan a Jerusalén y preguntan: “¿Dónde ha nacido el Rey de los judíos?”, el rey Herodes se inquieta y manda llamar a los jefes de los sacerdotes y a los eruditos de la época y les pregunta: “¿Dónde había de nacer el Cristo?” Y estos responden que en Belén de Judá, porque así lo habló el profeta y recuerdan aquella profecía: “Pero tú, Belén, en la tierra de Judá, de ninguna manera eres la menor entre los principales de Judá, porque de ti saldrá un príncipe que será el pastor de mi pueblo Israel” (Mateo 2:6, NVI). En este relato nos encontramos con Dios rompiendo paradigmas, que, de lo sencillo, de lo pequeño, de lo aparentemente insignificante, realizan hazañas grandes y maravillosas. En Belén de Judá se cumple la profecía cuando Jesús nace humildemente en ese pequeño establo.

DESAFÍO

Partiendo de la reflexión anterior y de la pregunta ¿Qué acción concreta nos puede llevar a ser una bendición para los demás hoy? Elijan cada uno a una persona y a través de una acción sean de bendición en el transcurso del día o de la semana.

ORACIÓN

Dios, gracias porque escoges lo sencillo y lo pequeño para hacer cosas grandes. Gracias por enseñarnos cada día que puedes usar nuestras vidas, tal como somos, para cumplir tus propósitos. Ayúdanos a confiar y recordar siempre que no importa cuán pequeños nos lleguemos a sentir, Tú nos amas y tienes un plan especial para nuestras vidas. ¡Amén!