Saetas BruñidasMuestra

Día 7: El impacto en el blanco - (Cumplir el propósito con precisión divina)

Cuando Dios lanza una saeta, nunca falla. Él no improvisa, no calcula mal, no se distrae. Cuando tú decides esperar Su tiempo y rendirte a Su mano, el impacto es certero. No llegarás donde tú quieres, sino donde Dios planeó desde antes de la fundación del mundo. Y ese lugar… es el blanco.

El impacto puede ser silencioso o estruendoso. Puede parecer pequeño a los ojos humanos, pero en el reino espiritual, ¡es explosivo! Porque no se trata de cuántos te ven, sino de cuántos son tocados por lo que Dios hizo a través de ti.

• Cada lágrima, cada proceso, cada pulido tenía sentido… porque todo te preparaba para este momento: cumplir el propósito eterno.
• Y cuando impactas, no lo haces con tu fuerza, sino con el poder del Espíritu. No por estrategia, sino por obediencia. No para tu gloria, sino para la Suya.

Preguntas para reflexionar:
¿Creo que Dios me puede usar con poder para tocar vidas en Su nombre?
¿Estoy viendo fruto donde Dios me ha lanzado, aunque no sea visible aún?
¿Puedo confiar en que, aunque no entienda todo, Dios está cumpliendo Su propósito?

Oración:

Padre,
gracias por lanzarme con propósito. No quiero golpear al azar, quiero impactar el blanco eterno que tú planeaste para mí. Usa mis palabras, mis pasos, mis silencios, usa mi historia, mis heridas, mis dones. Haz que cada parte de mi vida tenga dirección divina.

No quiero desperdiciar mi vuelo, quiero ser eficaz en tus manos, una saeta que cumple su destino. Que cada cosa que haga en tu nombre marque corazones y glorifique tu presencia. Gracias porque no me lanzaste al vacío, me lanzaste con poder y precisión. Yo confío en ti. En el nombre de Jesús, amén.