Una vida de intimidad con DiosMuestra

El secreto de su fuerza
“Sansón se enamoró de... Dalila... Los... filisteos le fueron a decir...: “Engaña a Sansón, y averigua el secreto de su gran fuerza... Finalmente, Sansón le confesó a Dalila su secreto: “...fui dedicado a Dios como nazareo...”, Jueces 16:4-17 (TLA).
La fuerza de Sansón no se debía a su larga cabellera sino a lo que esto simbolizaba: “El cabello que lleva sobre su cabeza es símbolo de su consagración a Dios”, Números 6:7 (NTV). El poder de Sansón no se desprendía de sus músculos sino de su santidad. La cabellera le recordaba diariamente lo débil y pequeño que era sin el Espíritu Santo que lo revestía, Miqueas 3:8. Dios era su fortaleza. El poder del nazareo descansa en la secreta comunión con Dios. Si la comunión se interrumpe, el poder se termina. Y eso pasó con Sansón.
¡La fuerza espiritual de una persona depende de su consagración a Dios! Mientras Sansón vivió apartado para Dios nadie podía derrotarlo. Sin embargo, Sansón empezó a coquetear con el pecado y perdió la santidad. Entonces “comenzó a debilitarse y la fuerza lo abandonó”, Jueces 16:19 (Versión griega). Los nazareos debían mostrarse puros; de lo contrario, perdían sus fuerzas. Para ellos el poder espiritual y la pureza eran inseparables, al igual que para nosotros. La santidad es indispensable, de ahí la urgente necesidad de permanecer siempre en alerta a las diversas cosas que arrastran el corazón, distraen el alma y rebajan el grado de espiritualidad. Sansón jugó con la paciencia de Dios. Lleno de presunción dijo: “Me escaparé como las otras veces... Pero no sabía que el Señor lo había abandonado”, Jueces 16:20 (NVI).
Cuidado con tratar con ligereza el pecado. Ponte en guardia contra una sola mirada en mala dirección, porque de seguro el corazón seguirá al ojo y los pies seguirán al corazón y así te alejarás del Señor, perderás el goce de su Presencia y te volverás vulnerable al enemigo. Permanece puro, Números 6:8. El poder espiritual de Sansón provenía de su consagración representada por su larga cabellera, Números 6:7. Sansón dijo: “...Si me cortaran el cabello, perdería mi fuerza...”, Jueces 16:17 (TLA). Y la perdió. Quedó sin fuerzas porque perdió su santidad. Recuérdalo: ¡el poder espiritual y la pureza son inseparables! No juegues con el pecado. Sansón lo hizo y perdió todo, incluso la vida. ¿Deseas vivir lleno del Espíritu Santo, caminando en poder sobrenatural, viendo lo invisible y haciendo lo imposible? ¡Conságrate a Dios en pureza! ¡Vive en santidad!
Acerca de este Plan

Cada día es una oportunidad para experimentar la presencia del Señor. Dios mismo es quien te extiende la dulce invitación para el encuentro santo: "Mi corazón te ha oído decir: «Ven y conversa conmigo». Y mi corazón responde: «Aquí vengo, SEÑOR»" (Salmo 27:8).
More
Nos gustaría agradecer a José Luis Cinalli - Silvia López de Cinalli por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://iglesiadelaciudad.com.ar/
Planes relacionados

La Compasión De Jesús: El Corazón De Una Vida Misional Un Plan De Lectura De 10 Días

El Espíritu Santo en Mateo

Viviendo en unidad en la diversidad

Cuando El Gozo Se Apaga

Edificados Para Su Gloria

El Consuelo De Los Salmos en Las Batallas De La Vida

Creer Lo Cambia Todo

Amar Sin Filtro: Fe, Ruptura y Restauración

Decisiones que traen paz
