Una vida de intimidad con DiosMuestra

Cómo ganar una batalla perdida
“Mis planes para ustedes... no son para su mal, sino para su bien. Voy a darles un futuro lleno de bienestar”, Jeremías 29:11 (TLA).
Josafat tenía un problema mayúsculo: un gran ejército le había declarado la guerra, 2º Crónicas 20. ¿Qué hizo? ¡Buscó a Dios! Se aprovechó de los recursos espirituales como la oración y el ayuno, pero también utilizó otro recurso para inclinar la guerra a su favor: “Confíen en nuestro Dios... si lo hacen, todo saldrá bien...”, 2º Crónicas 20:20 (TLA). Renglón seguido nombró cantores que caminaran delante del ejército cantando y agradeciendo al Señor, 2º Crónicas 20:21. ¡La gratitud activó la protección de Dios! “En cuanto empezaron a cantar, Dios confundió a los enemigos... se pelearon entre ellos... y... cayeron derrotados”, 2º Crónicas 20:22-23 (TLA). Las únicas armas que se utilizaron para lograr semejante victoria fueron la alabanza y la gratitud. La fuerza de este ejército no radicaba en su armamento militar sino en SU CONFIANZA EN DIOS. Y lo mismo sucederá contigo.
¿Cuál es la batalla más fuerte que estás librando en este tiempo? ¿Cuál es tu problema más grande? ¿Una adicción? ¿Una enfermedad? ¿Un temor? ¿Una traición? Pues tienes dos opciones: pelear con recursos humanos o confiar en Dios.
Para Dios no existe dificultad o crisis demasiado grande; para Él son todas igualmente posibles de resolver. Cuanto mayor sea la dificultad, mejor la ocasión para intervenir como un Dios benigno y todopoderoso. Recuérdalo: ¡si confías en Dios, TODO SALDRÁ BIEN!
¿Cuál fue el único recurso que utilizó la primera iglesia para ayudar a que Pedro saliera de la cárcel? ¡La oración!, Hechos 12:5. ¿Qué hicieron Pablo y Silas para defenderse de sus enemigos? Oraron y cantaron a Dios, Hechos 16:25. ¿Cómo hizo Cornelio para atraer a Dios a su casa? ¿Y qué hizo Josué para que Dios no abandonara a Israel? Emplearon principios espirituales como la honra, el respeto y el temor de Dios, Hechos 10:2 y Josué 7. ¿Cómo enfrentó Nehemías la crítica injusta? En oración, Nehemías 4:4 y 9. ¿Te das cuenta? Todos pelearon sus batallas con recursos espirituales como la oración, el ayuno, el respeto, el temor, las alabanzas y la acción de gracias. Estos ‘veteranos de guerra’ nos instruyen en cómo pelear para vencer. Imitemos su conducta. ¡Cuán poderoso es el carruaje de guerra cuando es guiado por los corceles de la oración y la gratitud!
Acerca de este Plan

Cada día es una oportunidad para experimentar la presencia del Señor. Dios mismo es quien te extiende la dulce invitación para el encuentro santo: "Mi corazón te ha oído decir: «Ven y conversa conmigo». Y mi corazón responde: «Aquí vengo, SEÑOR»" (Salmo 27:8).
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Nos gustaría agradecer a José Luis Cinalli - Silvia López de Cinalli por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://iglesiadelaciudad.com.ar/