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2 Corintios 1:17 (NVI)
Al proponerme esto, ¿acaso lo hice a la ligera? ¿O es que hago mis planes según criterios meramente humanos, de manera que diga «sí, sí» y «no, no» al mismo tiempo?
2 Corintios 2:5 (NVI)
Si alguno ha causado tristeza, no me la ha causado solo a mí; hasta cierto punto —y lo digo para no exagerar— se la ha causado a todos ustedes.
2 Corintios 3:18 (NVI)
Así, todos nosotros, que con el rostro descubierto reflejamos como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados a su semejanza con más y más gloria por la acción del Señor, que es el Espíritu.
2 Corintios 1:12 (NVI)
Para nosotros, el motivo de satisfacción es el testimonio de nuestra conciencia: Nos hemos comportado en el mundo, y especialmente entre ustedes, con la santidad y sinceridad que vienen de Dios. Nuestra conducta no se ha ajustado a la sabiduría humana, sino a la gracia de Dios.
2 Corintios 2:16 (NVI)
Para estos somos olor de muerte que los lleva a la muerte; para aquellos, olor de vida que los lleva a la vida. ¿Y quién es competente para semejante tarea?
2 Corintios 1:21 (NVI)
Dios es el que nos mantiene firmes en Cristo, tanto a nosotros como a ustedes. Él nos ungió,
2 Corintios 2:10 (NVI)
A quien ustedes perdonen, yo también lo perdono. De hecho, si había algo que perdonar, lo he perdonado por consideración a ustedes en presencia de Cristo,
2 Corintios 1:8 (NVI)
Hermanos, no queremos que desconozcan las aflicciones que sufrimos en la provincia de Asia. Estábamos tan agobiados bajo tanta presión que hasta perdimos la esperanza de salir con vida:
2 Corintios 2:2 (NVI)
Porque, si yo los entristezco, ¿quién me brindará alegría, sino aquel a quien yo haya entristecido?
2 Corintios 2:6 (NVI)
Para él es suficiente el castigo que le impuso la mayoría.
2 Corintios 2:9 (NVI)
Con este propósito escribí: para ver si pasan la prueba de la completa obediencia.
2 Corintios 2:11 (NVI)
para que Satanás no se aproveche de nosotros, pues no ignoramos sus artimañas.
2 Corintios 2:14 (NVI)
Sin embargo, gracias a Dios que en Cristo siempre nos lleva triunfantes y, por medio de nosotros, esparce por todas partes la fragancia de su conocimiento.
2 Corintios 1:1 (NVI)
Pablo, apóstol de Cristo Jesús por la voluntad de Dios, y Timoteo nuestro hermano, a la iglesia de Dios que está en Corinto y a todos los creyentes en toda la región de Acaya:
2 Corintios 1:2 (NVI)
Que Dios nuestro Padre y el Señor Jesucristo les concedan gracia y paz.
2 Corintios 1:9 (NVI)
nos sentíamos como sentenciados a muerte. Pero eso sucedió para que no confiáramos en nosotros mismos, sino en Dios, que resucita a los muertos.
2 Corintios 1:24 (NVI)
No es que intentemos imponerles la fe, sino que deseamos contribuir a la alegría de ustedes, pues por la fe se mantienen firmes.
2 Corintios 1:3 (NVI)
Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre misericordioso y Dios de toda consolación,
2 Corintios 1:13 (NVI)
No estamos escribiéndoles nada que no puedan leer ni entender. Espero que lleguen a comprender todo,
2 Corintios 1:16 (NVI)
es decir, visitarlos de paso a Macedonia y verlos otra vez a mi regreso de allá. Así podrían ayudarme a seguir el viaje a Judea.
2 Corintios 1:19 (NVI)
Porque el Hijo de Dios, Jesucristo, a quien Silvano, Timoteo y yo predicamos entre ustedes, no fue «sí» y «no»; en él siempre ha sido «sí».
2 Corintios 1:22 (NVI)
nos selló como propiedad suya y puso su Espíritu en nuestro corazón como garantía de sus promesas.
2 Corintios 1:5 (NVI)
Pues, así como participamos abundantemente en los sufrimientos de Cristo, así también por medio de él tenemos abundante consuelo.
2 Corintios 1:18 (NVI)
Pero tan cierto como que Dios es fiel, el mensaje que les hemos dirigido no es «sí» y «no».
2 Corintios 1:10 (NVI)
Él nos libró y nos librará de tal peligro de muerte. En él tenemos puesta nuestra esperanza y él seguirá librándonos.