Iglesia Confraternidad de Rionegro

El apóstol Pablo ha venido expresando su amor y gratitud con la iglesia, pero también su deseo de que ellos se enfoquen en lo importante más allá de las luchas y sufrimientos que esto puede traer, les anima a mantenerse firmes. Pablo expresa su gozo por causa de las prisiones ya que ellas no son una vergüenza sino una ventaja ya que por causa de sus cadenas otros se han animado a predicar el Evangelio con valor. Además de presentar su dilema ¿vivir o morir?

Es por causa del sufrimiento de Pablo que ahora exhorta a los filipenses a vivir como una iglesia unida, rechazando el egoísmo y ambiciones personales.

Por tanto; Pablo está conectando lo que ha dicho con lo que va a decir. Lo que se ha mencionado hasta el momento es lo que le dará base a lo que expresará.

(Vers.1) Pablo presenta una serie de beneficios que son producto de la comunión con Cristo. El "Si" de Pablo es un condicional.

"Si sientes esto, entonces deben hacer esto otro"

(Vers. 2) Pablo ha expresado su gozo y alegría por la actitud que la iglesia ha tenido hasta ese momento, pero pueden hacer más y eso que pueden hacer de más generará más alegría en Pablo.

¿Qué espera Pablo?

Que la iglesia se mantenga unida.

"El pueblo unido, jamás será vencido" (dicho popular)

Esta unidad que Pablo expresa no es la que se da solo por estar juntos. Existe una gran diferencia entre estar juntos y estar unidos. Podemos estar juntos pero no unidos.

1. Tener un mismo parecer (sentimiento o pensamiento)
2. Tenet un mismo amor (un amor genuino que nos lleve a la acción)
3. Estando unidos en todo

Esta unidad es la que les permitirá hacer frente a las diferentes circunstancias que el día a día les trae.

Mantener esta unidad es responsabilidad de cada uno de los creyentes.

(Vers. 3) En contraposición a la unidad que Pablo espera de los filipenses está el egoísmo y la vanidad. Dos actitudes que en nada ayudan para conseguir el propósito de ser un cuerpo.

El remedio contra el egoísmo y el deseo de figurar por encima de los demás es la humildad. No la humildad que confundimos con pobreza o necesidad material.

Pablo mismo define qué clase de humildad es la que nos ayudará a vencer aquello que nos separa.

"Consideren a los demás como superiores a ustedes mismos"

La humildad tiene que ver con tener una correcta imagen de quién soy yo y de quienes son los demás. Ante Dios todos somos iguales.

(vers. 4) El resultado de vivir con una actitud humilde, hará que haya en cada uno de nosotros, de manera natural, un verdadero interés por los demás.

Todos sufrimos y pasamos situaciones difíciles, pero cuando somos parte del cuerpo no deberíamos pasar estos conflictos solos y no deberíamos permitir que nuestros hermanos sientan que están solos (pero esto es una tarea de todos)

Pablo quiere asegurarse que este consejo llegue a lo profundo no solo de sus pensamientos, sino también a lo profundo de su corazón. Para esto Pablo usará parte de lo que algunos creen fue un himno que se cantaba para otros, un poema.

Pero Pablo pone esto como un modelo a seguir.

"La actitud de ustedes debe ser como la de Cristo"

Él es nuestro modelo por excelencia. Podemos tener muchos referentes en la vida, personas que han vivido de manera que se convierten en un modelo. Pero Cristo debe ser nuestro mayor ejemplo de todo aquello que como iglesia (creyentes) debemos manifestar.

Esta actitud de Cristo (amor, humildad, obediencia, servicio, etc.) hizo que se diera el mayor milagro para la humanidad, trayendo como resultado redención y libertad a nuestra vida.

Para Cristo esto le significó recibir toda la autoridad sobre el cielo y la tierra.

La única manera que el mundo tiene de recibir el beneficio que trajo la actitud de Cristo es que nosotros, su iglesia, sus representantes tengas la capacidad de intencionalmente caminar en unidad y amor, siendo humildes, abandonando el egoísmo. Como un cuerpo caminando hacia la misión que Jesús, el que tiene toda la autoridad nos ha delegado.

Toda rodilla se doblará y toda lengua confesará que Jesucristo es el Señor en la medida que nosotros hacemos lo que tenemos que hacer.