¿Qué gigantes recorren tu mundo? Cuando Goliat perdió su cabeza los Israelitas convirtieron a David en héroe. La gente comenzó a cantar la famosa canción “Saul mató a mil y David a su 10 mil y el pueblo se regocijaba”. Y desde aquel día Saul no miró con buenos ojos a David, y trató de matarlo en varias ocasiones. David tenía un nuevo gigante que enfrentar, pero Dios contrarresta la maldad de Saul con la lealtad de Jonathan su amigo fiel. Te imaginas tener un amigo tan fiel que te proteja que no busque nada sino solo tu felicidad?David encontró un amigo en el príncipe de Israel y tú puedes encontrar un amigo en el rey de Israel, Jesucristo.

Los gigantes en nuestra vida no se forman en un solo día, sino que comienzan poco a poco, influyendo miedo, angustia y temor, y esto sucede cuando no escuchamos la voz de Dios y si no la escuchamos, estamos expuestos a ser derrotados antes de enfrentar la batalla.

David se enfrentaba a un nuevo gigante, nada más y nada menos que el rey de Israel, Saul. Cuántas veces hemos tenido gigantes que afrontar como la pérdida de un familiar, vivir solos en una ciudad, tu jefe de mal humor siempre, sin soluciones financieras, y muchas veces hacemos lo que hizo David, HUIR.

¿Cual es ese gigante que se ha estancado en tu vida? ¿Cual es ese gigante que te intimida, te hace correr y buscar donde esconderse? Haz lo que hizo David. Ve y huye, pero hacia el santuario de Dios, a obtener pan y una espada en la Iglesia, en otras palabras, fuerza para el día y armas para la batalla.

Para el hambre espiritual la Iglesia ofrece nutrición:

Al fugitivo de la Iglesia le ofrece armas de verdad: