Centro de Adoración Sin Límites

Estoy en Cristo y... Su gracia lo cambia todo!!!
Culto dominical del 20 de Noviembre de '16
Locations & Times
Centro de Adoración Sin Límites
300 mts. Sur de Jumbo Supermercados, Alajuela, Costa Rica
Sunday 9:30 AM
Déjeme, por favor, recordarle algunas cosas que dijimos:
1. La misericordia está relacionada a la condición presente, la gracia a la condición futura.
2. El sentimiento que Dios tiene hacia nosotros cuando somos pecadores es misericordia, pero la obra que Dios hace en nosotros al hacernos sus hijos es gracia.
Deseo empezar la serie de verdades espirituales de hoy con la siguiente: Por medio de proporcionarnos una nueva posición, nueva esfera y nuevo ambiente, Dios nos entrega un nuevo futuro para nuestras vidas. Pero ese futuro al cuál se refiere Dios es en este tiempo, y no a un futuro en un próximo tiempo.
Entendamos esto que leímos en Efesios: la misericordia nos fue mostrada porque estábamos muertos en pecado; luego la gracia nos fue dada para nuestra salvación, pues la gracia otorga nueva posición, nueva esfera y nuevo ambiente. Y a esto le llamamos… Reino de Dios.
Ahora veamos lo que leímos en Romanos: Dios nos sujetó a todos a desobediencia con el propósito de mostrar misericordia a todos. Por tanto, la misericordia está relacionada con nuestra condición previa a ser salvos.
Ahora veamos lo que leímos en Romanos: Dios nos sujetó a todos a desobediencia con el propósito de mostrar misericordia a todos. Por tanto, la misericordia está relacionada con nuestra condición previa a ser salvos.
Permítame darle una verdad espiritual más: Debemos de entender que la misericordia fluye para, quienes estando en pecado, no tienen derecho a ser perdonados. Pero la gracia fluye para, quienes, habiendo sido perdonados, ahora tienen acceso a un nuevo estilo de vida.

"... y hallar gracia para el oportuno socorro."
El escritor de Hebreos nos motiva a venir a Su presencia para dos cosas:
1. Recibir misericordia. O sea, que todo está allí, listo para ser usado por nosotros en cualquier momento
2. Hallar gracia. Osea, que es algo que se debe encontrar y desarrollar.
1. Recibir misericordia. O sea, que todo está allí, listo para ser usado por nosotros en cualquier momento
2. Hallar gracia. Osea, que es algo que se debe encontrar y desarrollar.
Es en esto que me veo en la necesidad de darle otra verdad espiritual: Cuando el ser humano está en la carne, cree que la misericordia es suficiente, o confunde la gracia con la misericordia que disfruta.
Él o ella piensa así porque no considera al pecado como algo realmente serio.
Si estuviéramos sin comida, ropa o casa, estoy seguro que la misericordia ofrecida por alguien no sería adecuada; necesitaríamos que hubiera gracia en esa misericordia. Lamentablemente, como el pecado aparentemente no representa una necesidad básica a llenar… no lo vemos como prioridad.
Unos y otros piensan que si Dios fuese solamente misericordioso e indulgente con todos estaría bien.
Sin embargo le tengo otra verdad espiritual para este pensamiento: El concepto de nosotros los hombres es permitir y dejar pasar. Pero Dios no puede dejar pasar misericordiosamente nuestros pecados. Él no puede dejarnos ir con una vida totalmente caótica. Él tratará totalmente con nuestros pecados para que nuestra vida alcance esa nueva posición, esa nueva esfera y ese nuevo ambiente del que tanto predicamos, y al que le llamamos Reino de Dios.
Sin embargo le tengo otra verdad espiritual para este pensamiento: El concepto de nosotros los hombres es permitir y dejar pasar. Pero Dios no puede dejar pasar misericordiosamente nuestros pecados. Él no puede dejarnos ir con una vida totalmente caótica. Él tratará totalmente con nuestros pecados para que nuestra vida alcance esa nueva posición, esa nueva esfera y ese nuevo ambiente del que tanto predicamos, y al que le llamamos Reino de Dios.

Déjeme ponerle el contrapeso a esto que le he hablado, pues la gracia no se recibe por lo que aportamos:
1. La gracia de Dios no tiene nada que ver con nuestros pecados.
2. La gracia de Dios no tiene nada que ver con nuestros logros.
3. La gracia de Dios no tiene nada que ver con nuestras responsabilidades.
1. La gracia de Dios no tiene nada que ver con nuestros pecados.
2. La gracia de Dios no tiene nada que ver con nuestros logros.
3. La gracia de Dios no tiene nada que ver con nuestras responsabilidades.
Quiero terminar con una hermosa verdad espiritual. No es mía, pero la voy a transcribir para ustedes:
"¡Aleluya! No existen pecados, logros o responsabilidades; la salvación maravillosamente es Dios para mí y no yo para Dios. Nuestra paz y gozo no recaen en cuánto amamos al Señor, sino en cuánto el Señor nos ama. Nuestra paz y gozo no recaen en cuánto hemos hecho para el Señor, sino en cuánto el Señor ha hecho para nosotros. No descansamos en lo que tenemos diariamente, sino en lo que Dios es."
"¡Aleluya! No existen pecados, logros o responsabilidades; la salvación maravillosamente es Dios para mí y no yo para Dios. Nuestra paz y gozo no recaen en cuánto amamos al Señor, sino en cuánto el Señor nos ama. Nuestra paz y gozo no recaen en cuánto hemos hecho para el Señor, sino en cuánto el Señor ha hecho para nosotros. No descansamos en lo que tenemos diariamente, sino en lo que Dios es."