¿Estás en pijama o vestido con la armadura de Dios?Muestra

La coraza de la justicia

“Y vestidos con la coraza de justicia” (Efesios 6:14, RVR1960). La justicia es el principio moral que lleva a determinar que todos deben vivir honestamente (definición de la Real Academia Española).

Para vestirnos con la coraza de la justicia, primeramente tenemos que ser justificados por medio de Jesucristo (Romanos 3:24). Se menciona que no hay justo, ni siquiera uno (Romanos 3:10), pero gracias a su sacrificio en la cruz, somos justificados ante la justicia de Dios. Una vez que hemos sido justificados, debemos actuar en justicia para que nuestras acciones sean equitativas hacia los demás; esto nos ayudará a erradicar cualquier injusticia que surja contra nosotros (Mateo 5:6).

Si existe justicia en nuestras acciones, podemos juzgar las injusticias que el prójimo pueda levantar contra nosotros. No obstante, debemos ser cautelosos al juzgar a los demás para no transformarnos en lo que criticamos, tal como Pablo dijo: “Por lo cual eres inexcusable, oh hombre, quienquiera que seas tú que juzgas; pues en lo que juzgas a otro, te condenas a ti mismo, porque tú que juzgas haces lo mismo” (Romanos 2:1, RVR1960).

En conclusión, para ponernos la coraza de la justicia, primeramente tenemos que ser justificados a través de Jesucristo; una vez siendo justificados, tenemos que ser justos en nuestras acciones y proclamar justicia para defendernos de toda injusticia que se levante contra nosotros y los que padecen de ella.