El poder de la pareja que oraMuestra

Entiendan cuándo hay que cambiar algo

En toda relación, llega el momento de reconocer que algo necesita cambiar. A veces no se trata del otro, sino de nuestra propia actitud, de la manera en que respondemos o de la dureza con la que juzgamos. El cambio comienza cuando dejamos de mirar lo que el otro debe hacer y permitimos que Dios transforme nuestro interior.

La adoración es una de las formas más poderosas de permitir ese cambio. Cuando una pareja deja todo a un lado para adorar a Dios, su presencia desciende y empieza a ordenar lo que está fuera de lugar. La alabanza cambia el ambiente, ablanda los corazones y renueva la mente. Allí donde hay adoración sincera, hay poder para sanar lo que parecía perdido.

A veces, creemos que para resolver un conflicto debemos hablar más, insistir más o exigir más. Pero, muchas veces, lo que necesitamos es adorar más. En la adoración, la perspectiva cambia: dejamos de enfocarnos en lo que falta y recordamos quién es Dios. Él no solo escucha las oraciones, también habita en medio de la alabanza.

Cuando una pareja decide invitar a Dios a cada área de su vida, sus planes, emociones, finanzas y palabras, empieza a experimentar cambios profundos. No porque las circunstancias mejoren de inmediato, sino porque sus corazones se vuelven más receptivos a la voz de Dios.

El cambio verdadero no se impone; se inspira en la presencia del Señor. Y cada vez que lo buscan juntos, Él moldea sus vidas a su imagen, les da sabiduría para actuar y los fortalece para permanecer unidos. Si algo debe transformarse hoy, comiencen adorando. Donde habita la presencia de Dios, todo florece de nuevo.

Oración:

Señor, transforma en nosotros lo que aún necesita cambiar. Habita en nuestra adoración y haz nuevo nuestro amor cada día. ¡Amén!