Dejando Que Dios Limpie Mi Corazón De MamáMuestra

DIA 24

LEVANTANDO INCIENSO DIARIO POR LA VIDA DE MIS HIJOS

PASAJE DEL DÍA:

“Una vez terminado el ciclo de los banquetes, Job se aseguraba de que sus hijos se purificaran. Muy de mañana ofrecía un holocausto por cada uno de ellos, pues pensaba: "Tal vez mis hijos hayan pecado y maldecido en sus corazones a Dios." Para Job esta era una costumbre cotidiana” (Job 1:5 NVI).

ENTENDAMOS:

En este tiempo ofrecer holocausto viene a ser elevar -por las mañanas- oración e intercesión, con alabanza y clamor por la vida de nuestros hijos, asumiendo sus pecados y trayéndolos delante de Dios. Ésta debe ser una costumbre cotidiana para toda madre.

POR QUÉ ORAMOS:

Pedimos perdón a Dios porque ofrecer holocausto no es una costumbre en nuestras vidas, sólo lo hacemos cuando estamos cargadas.

Que Dios nos dé la convicción de asumir los pecados de nuestros hijos, como si fueran nuestros.

Que podamos entender la necesidad de levantar este incienso todos los días.

Que Dios nos dé carga por la santidad de nuestros hijos.

Padre bueno, Señor Jesús, Espíritu Santo: Quiero ponerme de acuerdo con ustedes en que he pecado, no he tomado tan en serio la santidad de mis hijos. A veces, sólo me preocupa que no hagan lo malo, y no que en sus corazones pequen contra ustedes. Les pido perdón por ello y les suplico que cambien mi manera de pensar y que me traigan revelación en cuanto a este asunto.

Hoy, Señor, yo asumo los pecados de mis hijos como míos y te pido perdón por todas las faltas que ellos han cometido, por todas sus rebeldías y desobediencias… Perdónanos, Señor. Deseo que Tú me enseñes a levantar este incienso todas las mañanas en tu altar y que tenga el hábito de hacerlo cada día. Amén.