Alimento Que EdificaMuestra

Separados Con Propósito
Dios envió a su Hijo Unigénito y lo entregó como sacrificio para darnos salvación aún siendo pecadores. Todo aquel que recibe este divino don de la Salvación, es apartado, separado para Él; a fin de que viva no como vive el mundo, sino conforme a su Hijo Jesús.
Fuimos separados con propósito por Dios, para expresar el carácter de su Santo Nombre a través de la gloriosa manifestación de su Hijo Jesús en nosotros; por el Espíritu de Dios somos conformados a Jesús, para vivir en la nueva vida que por fe y por gracia en Él hemos recibido, una vida donde el pecado es vencido con la Santidad de su Nombre.
Hemos sido libres del pecado; que en este día sea avivado nuestro espíritu a través de la libertad en la que hemos sido cimentados, para que el propósito de santificación se cumpla en nosotros mientras nos apartamos de hacer el mal y nos ocupamos de obedecer a nuestro Padre en todo momento y en todo lugar.
No pertenecemos al mundo; por lo tanto, no vivimos ni vemos la vida como el mundo lo hace. Por Jesús, no nadamos con la corriente sino contra la corriente de este mundo. Somos Luz, no somos oscuridad. Por la fe y la gracia que hemos recibido, amamos la santidad y la justicia, y aborrecemos el pecado. Hemos recibido una vida nueva en el Nombre de Jesucristo, y como Él debemos vivir, en absoluta obediencia hacia el Padre. Que nuestro único afán en este día sea honrar la salvación que hemos recibido a través de Jesús, dando los frutos del Espíritu.
"Señor Jesús, me rindo ante ti; sé que solo puedo adorar a nuestro Padre en espíritu y en verdad a través de la manifestación de tu Nombre en mi vida. Ayúdame a crecer en tu Nombre, que el Espíritu que me ha sido dado fluya en mí de tal manera que tu Nombre sea expresado y testificado en todo tiempo y en todo lugar en el que me permitas estar. Que puedan ver tu Luz en mí, que sea tu Nombre revelándose a través de la nueva vida que me diste. Me has dado identidad en tu Nombre y es en tu Nombre como quieres que viva y como quiero vivir". Amén.
Acerca de este Plan

Como hijos de Dios, no podemos vivir un solo día sin el alimento que nutre la nueva vida que hemos recibido en el Nombre de Jesucristo; no hay forma alguna en que podamos honrar a nuestro Padre, si no es a través del Poder regenerador que produce su Palabra. Confío en que este plan será de edificación para ti, que se haga conforme a la voluntad de nuestro buen Dios, con cada exhortación, mandato y promesa para tu vida. Amén.
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Nos gustaría agradecer a Marysela Ocampo O. por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://facebook.com/confiadosenJesucristo