SALMOS 65
65
Salmo 65 (64)
Tú colmas la tierra de bienes#Salmo 65 (64): Himno a Dios a quien se alaba por su presencia protectora en Sión (65,2-5), por su dominio sobre la naturaleza y la historia (65,6-9) y por los cuidados que dispensa a la tierra garantizando la fecundidad de los campos (65,10-13).
1Al maestro del coro. Salmo de David. Cántico.
2Tú mereces la alabanza#65,2: tú mereces la alabanza: Otra lectura: “para ti el silencio es una alabanza”.,
oh Dios que estás en Sión,
mereces que se te cumplan las promesas,
3pues tú escuchas las oraciones
y todos los humanos acuden a ti.
4Las culpas nos tienen abrumados,
pero tú perdonas nuestros pecados.#78,38.
5Felices a quienes escoges y llevas
a que habiten en tus atrios.
Nos saciaremos de los bienes de tu casa,
de los dones sagrados de tu Templo#65,5: dones sagrados de tu Templo: En esta sección inicial (65,2-5) Sión es presentada como centro de la vida religiosa y lugar de culto donde se alaba a Dios, se cumplen los votos, se reconocen y perdonan los pecados y, tras ser admitido en el Templo, se participa en la liturgia..#23,6; 36,9; 63,6; Jr 31,14.
6Tu justicia salvadora
nos responde con prodigios,
oh Dios, salvador nuestro,
esperanza del confín del mundo
y de los mares más remotos.
7Con su fuerza afianza los montes
revestido todo él de poder;#24,2; 119,90.
8calma el fragor de los mares,
serena el fragor de sus olas
y el estruendo de los pueblos#65,8: el estruendo de los pueblos: Al poder del Señor sobre las fuerzas hostiles de la naturaleza, simbolizadas por el mar embravecido, se une su dominio sobre la historia pues, lo mismo que controla el oleaje del mar, también él acalla y sojuzga el tumulto de las naciones..#89,10; 107,29; Mt 8,26.
9Cuantos viven en el confín del mundo
te veneran por tus prodigios,
tú alegras a oriente y occidente#65,9: a oriente y occidente: Lit. las puertas de la aurora y el ocaso. El señorío de Dios sobre el universo inunda de respeto y gozo a todos los seres humanos y hasta los extremos del orbe, personificados, se llenan de júbilo..#67,5; Is 66,23.
10Cuidas la tierra y la riegas,
la colmas de bienes sin fin;
la acequia de Dios#65,10: la acequia de Dios: O bien como expresión de superlativo, la acequia caudalosa. Posible alusión a los depósitos celestes que, según el pensamiento semítico antiguo, contenían la lluvia. Ver Jb 38,25. rebosa de agua,
pones a punto la tierra para el grano:#46,5, 104,13-14; Os 2,10; Jl 2,19; 4,18.
11inundas los surcos, deshaces los terrones,
con lluvia la ablandas, bendices su semilla.#Is 30,23.
12Tú coronas el año con tus bienes,
y tus decisiones son fuente de abundancia#65,12: son fuente de abundancia: Dios manifiesta también su bondad actuando sobre la naturaleza más cercana al ser humano y, cual labrador, se ocupa de preparar la tierra de la que depende su sustento, de regular el ciclo de fecundidad de los campos (65,10-12)..
13Los pastos del desierto rezuman,
tú ciñes de alegría los montes#65,13: tú ciñes de alegría los montes: Una naturaleza personificada se suma con su canto al regocijo del salmista. Nótese el contraste entre el clamor del mar (65,8) y el que aquí resuena.,#96,12; Am 9,13.
14los prados se revisten de rebaños
y los valles se cubren de grano
y cantan gritando de alegría.
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La Biblia Hispanoamericana (BHTI) Traducción Interconfesional versión hispanoamericana Copyright © Sociedad Bíblica de España, 2011 Utilizada con permiso