La Santa Biblia, Nueva Versión Internacional TM, NVI TM (Castilian), CG Audio Edition

La Santa Biblia, Nueva Versión Internacional TM, NVI TM (Castilian), CG Audio Edition Audio Copyright ℗ 2021 by Biblica, Inc. Used with permission. All rights reserved worldwide. La Santa Biblia, Nueva Versión Internacional TM, NVI TM (Castilian) Copyright © 1981, 1999, 2017 by Biblica, Inc. Used with permission. All rights reserved worldwide. “Biblica”, “International Bible Society” and the Biblica Logo are trademarks registered in the United States Patent and Trademark Office by Biblica, Inc. Used with permission.

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 <div class="chapter ch7" data-usfm="2SA.7">
 <div class="label">7</div><div class="s1">Promesa de Dios a David</div><div class="sr"> 7:1-17 &#8211; 1Cr 17:1-15</div><div class="p"> 1Una vez que el rey David se hubo establecido en su palacio, el Se&#241;or le dio descanso de todos los enemigos que lo rodeaban. 2Entonces el rey le dijo al profeta Nat&#225;n:</div><div class="p">&#8213;Como puedes ver, yo habito en un palacio de cedro, mientras que el arca de Dios se encuentra bajo el toldo de una tienda de campa&#241;a.</div><div class="p"> 3&#8213;Bien &#8212;respondi&#243; Nat&#225;n&#8212;. Haz lo que tu coraz&#243;n te dicte, pues el Se&#241;or est&#225; contigo.</div><div class="p"> 4Pero aquella misma noche la palabra del Se&#241;or vino a Nat&#225;n y le dijo:</div><div class="pm"> 5&#171;Ve y dile a mi siervo David que as&#237; dice el Se&#241;or: &#8220;&#191;Ser&#225;s t&#250; acaso quien me construya una casa para que yo la habite? 6Desde el d&#237;a en que saqu&#233; a los israelitas de Egipto, y hasta el d&#237;a de hoy, no he habitado en casa alguna, sino que he andado de ac&#225; para all&#225;, en una tienda de campa&#241;a a manera de santuario. 7Todo el tiempo que anduve con los israelitas, cuando mand&#233; a sus gobernantes que pastorearan a mi pueblo Israel, &#191;acaso le reclam&#233; a alguno de ellos el no haberme construido una casa de cedro?&#8221;</div><div class="pm"> 8&#187;Pues bien, dile a mi siervo David que as&#237; dice el Se&#241;or Todopoderoso: &#8220;Yo te saqu&#233; del redil para que, en vez de cuidar ovejas, gobernaras a mi pueblo Israel. 9Yo he estado contigo por dondequiera que has ido, y he aniquilado a todos tus enemigos. Y ahora voy a hacerte tan famoso como los m&#225;s grandes de la tierra. 10Tambi&#233;n voy a designar un lugar para mi pueblo Israel, y all&#237; los plantar&#233; para que puedan vivir sin sobresaltos. Sus malvados enemigos no volver&#225;n a humillarlos como lo han hecho desde el principio, 11desde el d&#237;a en que nombr&#233; gobernantes sobre mi pueblo Israel. Y a ti te dar&#233; descanso de todos tus enemigos.</div><div class="pm">&#187;&#8221;Pero ahora el Se&#241;or te hace saber que ser&#225; &#233;l quien te construya una casa. 12Cuando tu vida llegue a su fin y vayas a descansar entre tus antepasados, yo pondr&#233; en el trono a uno de tus propios descendientes, y afirmar&#233; su reino. 13Ser&#225; &#233;l quien construya una casa en mi honor, y yo afirmar&#233; su trono real para siempre. 14Yo ser&#233; su padre, y &#233;l ser&#225; mi hijo. As&#237; que, cuando haga lo malo, lo castigar&#233; con varas y azotes, como lo har&#237;a un padre. 15Sin embargo, no le negar&#233; mi amor, como se lo negu&#233; a Sa&#250;l, a quien abandon&#233; para abrirte paso. 16Tu casa y tu reino durar&#225;n para siempre delante de m&#237;;#7:16 m&#237; (mss. hebreos; v&#233;anse LXX y Sir&#237;aca); ti (TM). tu trono quedar&#225; establecido para siempre&#8221;&#187;.</div><div class="p"> 17Nat&#225;n le comunic&#243; todo esto a David, tal como lo hab&#237;a recibido por revelaci&#243;n.</div><div class="s1">Oraci&#243;n de David</div><div class="sr"> 7:18-29 &#8211; 1Cr 17:16-27</div><div class="p"> 18Luego el rey David se present&#243; ante el Se&#241;or y le dijo:</div><div class="pm">&#171;Se&#241;or y Dios, &#191;qui&#233;n soy yo, y qu&#233; es mi familia, para que me hayas hecho llegar tan lejos? 19Como si esto fuera poco, Se&#241;or y Dios, tambi&#233;n has hecho promesas a este tu siervo en cuanto al futuro de su dinast&#237;a. &#161;Tal es tu plan para con los hombres, Se&#241;or y Dios!#7:19 &#161;Tal &#8230; Dios! Alt. &#191;As&#237; procedes con el hombre, Se&#241;or y Dios? o &#191;As&#237; act&#250;a el hombre, Se&#241;or y Dios?</div><div class="pm"> 20&#187;&#191;Qu&#233; m&#225;s te puede decir tu siervo David que t&#250; no sepas, Se&#241;or mi Dios? 21Has hecho estas maravillas en cumplimiento de tu palabra, seg&#250;n tu voluntad, y las has revelado a tu siervo.</div><div class="pm"> 22&#187;&#161;Qu&#233; grande eres, Se&#241;or omnipotente! Nosotros mismos hemos aprendido que no hay nadie como t&#250;, y que aparte de ti no hay Dios. 23&#191;Y qu&#233; naci&#243;n se puede comparar con tu pueblo Israel? Es la &#250;nica naci&#243;n en la tierra que t&#250; has redimido, para hacerla tu propio pueblo y para dar a conocer tu nombre. Hiciste prodigios y maravillas cuando al paso de tu pueblo, al cual redimiste de Egipto, expulsaste a las naciones y a sus dioses.#7:23 cuando al paso &#8230; a sus dioses (LXX; v&#233;ase 1Cr 17:21); por tu tierra al paso de tu pueblo, al cual redimiste de Egipto, de las naciones y sus dioses (TM). 24Estableciste a Israel para que fuera tu pueblo para siempre, y para que t&#250;, Se&#241;or, fueras su Dios.</div><div class="pm"> 25&#187;Y ahora, Se&#241;or y Dios, reafirma para siempre la promesa que les has hecho a tu siervo y a su dinast&#237;a. Cumple tu palabra 26para que tu nombre sea siempre exaltado, y para que todos digan: &#8220;&#161;El Se&#241;or Todopoderoso es Dios de Israel!&#8221; Entonces la dinast&#237;a de tu siervo David quedar&#225; establecida en tu presencia.</div><div class="pm"> 27&#187;Se&#241;or Todopoderoso, Dios de Israel, t&#250; le has revelado a tu siervo el prop&#243;sito de establecerle una dinast&#237;a, y por eso tu siervo se ha atrevido a hacerte esta s&#250;plica. 28Se&#241;or mi Dios, t&#250; que le has prometido tanta bondad a tu siervo, &#161;t&#250; eres Dios, y tus promesas son fieles! 29D&#237;gnate entonces bendecir a la familia de tu siervo, de modo que bajo tu protecci&#243;n exista para siempre, pues t&#250; mismo, Se&#241;or omnipotente, lo has prometido. Si t&#250; bendices a la dinast&#237;a de tu siervo, quedar&#225; bendita para siempre&#187;.</div>
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Una vez que el rey David se hubo establecido en su palacio, el SEÑOR le dio descanso de todos los enemigos que lo rodeaban. Entonces el rey le dijo al profeta Natán:
―Como puedes ver, yo habito en un palacio de cedro, mientras que el arca de Dios se encuentra bajo el toldo de una tienda de campaña.
―Bien —respondió Natán—. Haz lo que tu corazón te dicte, pues el SEÑOR está contigo.
Pero aquella misma noche la palabra del SEÑOR vino a Natán y le dijo:
«Ve y dile a mi siervo David que así dice el SEÑOR: “¿Serás tú acaso quien me construya una casa para que yo la habite? Desde el día en que saqué a los israelitas de Egipto, y hasta el día de hoy, no he habitado en casa alguna, sino que he andado de acá para allá, en una tienda de campaña a manera de santuario. Todo el tiempo que anduve con los israelitas, cuando mandé a sus gobernantes que pastorearan a mi pueblo Israel, ¿acaso le reclamé a alguno de ellos el no haberme construido una casa de cedro?”
»Pues bien, dile a mi siervo David que así dice el SEÑOR Todopoderoso: “Yo te saqué del redil para que, en vez de cuidar ovejas, gobernaras a mi pueblo Israel. Yo he estado contigo por dondequiera que has ido, y he aniquilado a todos tus enemigos. Y ahora voy a hacerte tan famoso como los más grandes de la tierra. También voy a designar un lugar para mi pueblo Israel, y allí los plantaré para que puedan vivir sin sobresaltos. Sus malvados enemigos no volverán a humillarlos como lo han hecho desde el principio, desde el día en que nombré gobernantes sobre mi pueblo Israel. Y a ti te daré descanso de todos tus enemigos.
»”Pero ahora el SEÑOR te hace saber que será él quien te construya una casa. Cuando tu vida llegue a su fin y vayas a descansar entre tus antepasados, yo pondré en el trono a uno de tus propios descendientes, y afirmaré su reino. Será él quien construya una casa en mi honor, y yo afirmaré su trono real para siempre. Yo seré su padre, y él será mi hijo. Así que, cuando haga lo malo, lo castigaré con varas y azotes, como lo haría un padre. Sin embargo, no le negaré mi amor, como se lo negué a Saúl, a quien abandoné para abrirte paso. Tu casa y tu reino durarán para siempre delante de mí; tu trono quedará establecido para siempre”».
Natán le comunicó todo esto a David, tal como lo había recibido por revelación.


Luego el rey David se presentó ante el SEÑOR y le dijo:
«SEÑOR y Dios, ¿quién soy yo, y qué es mi familia, para que me hayas hecho llegar tan lejos? Como si esto fuera poco, SEÑOR y Dios, también has hecho promesas a este tu siervo en cuanto al futuro de su dinastía. ¡Tal es tu plan para con los hombres, SEÑOR y Dios!
»¿Qué más te puede decir tu siervo David que tú no sepas, SEÑOR mi Dios? Has hecho estas maravillas en cumplimiento de tu palabra, según tu voluntad, y las has revelado a tu siervo.
»¡Qué grande eres, SEÑOR omnipotente! Nosotros mismos hemos aprendido que no hay nadie como tú, y que aparte de ti no hay Dios. ¿Y qué nación se puede comparar con tu pueblo Israel? Es la única nación en la tierra que tú has redimido, para hacerla tu propio pueblo y para dar a conocer tu nombre. Hiciste prodigios y maravillas cuando al paso de tu pueblo, al cual redimiste de Egipto, expulsaste a las naciones y a sus dioses. Estableciste a Israel para que fuera tu pueblo para siempre, y para que tú, SEÑOR, fueras su Dios.
»Y ahora, SEÑOR y Dios, reafirma para siempre la promesa que les has hecho a tu siervo y a su dinastía. Cumple tu palabra para que tu nombre sea siempre exaltado, y para que todos digan: “¡El SEÑOR Todopoderoso es Dios de Israel!” Entonces la dinastía de tu siervo David quedará establecida en tu presencia.
»SEÑOR Todopoderoso, Dios de Israel, tú le has revelado a tu siervo el propósito de establecerle una dinastía, y por eso tu siervo se ha atrevido a hacerte esta súplica. SEÑOR mi Dios, tú que le has prometido tanta bondad a tu siervo, ¡tú eres Dios, y tus promesas son fieles! Dígnate entonces bendecir a la familia de tu siervo, de modo que bajo tu protección exista para siempre, pues tú mismo, SEÑOR omnipotente, lo has prometido. Si tú bendices a la dinastía de tu siervo, quedará bendita para siempre».

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