Logo de YouVersion
Ícono Búsqueda

Amigos De DiosMuestra

Amigos De Dios

DÍA 4 DE 5

El mejor amigo

Como hemos venido diciendo, una de las bendiciones que podemos tener los seres humanos es poder contar con buenos amigos, esos que nos enriquecen con su amistad. Dichosos los que podemos contar con esas almas nobles que añaden valor a nuestras vidas y de las que podemos esperar lo mejor.

Acerca de una buena amistad, la Biblia nos dice en el libro de Proverbios que “El hombre que tiene amigos ha de mostrarse amigo; y amigo hay más unido que un hermano” (Prov. 18:24).

La confianza, la comprensión, la empatía, la compañía son sólo algunas de las cosas que más valoramos en un amigo(a). Qué bueno tener quién nos escuche y tener la convicción de que esa persona no andará contándole a los demás lo que le hemos compartido. Reír y llorar juntos, apoyar y ser apoyados, es decir: “mostrarse amigo”, ir más allá de las palabras.

Si eso es tremenda bendición cuánto más lo será el ser llamados amigos del Señor. Estamos hablando del Creador, del Eterno, de nuestro Salvador. Es Jesús, el que nos salvó cuando aún éramos enemigos a causa de nuestro pecado. Él dio su vida por nosotros y al creer en su obra en la cruz recibimos el perdón de nuestros pecados.

Desde ese momento comenzó nuestra amistad con nuestro Señor. Ya no somos enemigos, ni extraños, hemos pasado a ser miembros de la familia de Dios. Recordemos las palabras de Jesús: “Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando. Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer” (Jn. 15:14-15).

¿Estás consciente de que tienes a un amigo amoroso y divino, que es el mejor amigo con el que puedes contar? Lo pregunto porque en ocasiones estamos tan distantes de nuestro buen amigo Jesús, que tal pareciera que nos sentimos más afines con nuestros amigos terrenales. Nuestras conversaciones con Él se hacen cada vez más escasas y no le decimos, repetida y genuinamente, cuánto lo amamos.

En el libro de Cantares encontramos la historia de amor de la sunamita y su amado. La descripción que ella hace de él nos deja ver de inmediato lo afortunada que es de tener su amor. Luego de describir con todo detalle las excelencias de su amor, termina diciéndole a las personas que la escuchan: “Su paladar, dulcísimo, y todo él codiciable. Tal es mi amado, tal es mi amigo, oh doncellas de Jerusalén” (Cant. 5:16).

Jesús es nuestro amado, nuestro amigo. ¿Lo saben los demás, esos que están cerca de nosotros? ¿Es nuestra amistad con Jesús tan valorada por nosotros que no queda duda alguna de cuánto le amamos?

Hoy es un buen día para volverle a decir al Señor que le amamos y que agradecemos inmensamente el poder tenerle como nuestro gran amigo, ese que jamás nos fallará.

Cuando vamos por la vida de su mano, podemos vivir confiadamente. Nuestro amigo con nosotros, presente en todas nuestras circunstancias.

Acerca de este Plan

Amigos De Dios

Todos necesitamos buenos amigos en nuestras vidas. Cuando los tenemos somos bienaventurados. Pero, no hay mayor bienaventuranza que contar con la amistad del mejor y más grande amigo, Jesús de Nazaret. En este plan dejaremos que la Palabra nos enseñe acerca del privilegio con el cual los hijos de Dios hemos sido bendecidos, el que seamos llamados sus amigos.

More

Nos gustaría agradecer a Grettchen Figueroa por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: facebook.com/GrettchenStage