Atesorando Sabiduría - La fortuna de escuchar a DiosMuestra

Verdad

Estos salmos de alabanza celebran el reinado eterno y soberano de Jehová. El Salmo 93 declara que “Jehová reina; se ha vestido de magnificencia”. Su trono es firme desde la eternidad, y su poder es mayor que el estruendo de las muchas aguas. El Salmo 95 nos llama a la respuesta lógica a este Rey: “Venid, aclamemos alegremente a Jehová… postrémonos y adoremos; arrodillémonos delante de Jehová nuestro Hacedor”. Pero también incluye una advertencia solemne: no debemos endurecer nuestro corazón como lo hizo Israel en el desierto.

Equipamiento

Estos salmos nos equipan para desarrollar en nosotros una fe reverente. Nos enseñan a contemplar a Dios en su grandeza y, al mismo tiempo, a responder con obediencia y gratitud. La virtud clave es la adoración sincera, que no se queda en palabras, sino que se refleja en la disposición de escuchar su voz y caminar en obediencia diaria.

Al corazón

¿Estoy escuchando y obedeciendo la voz del Señor como oveja que sigue a su Pastor?

¿Qué me impide vivir cada día con una actitud de gratitud y reverencia?

Misión

Hoy toma un momento para detenerte en la rutina y adorar a Dios por su majestad y bondad, expresándole gratitud concreta por lo que ha hecho en tu vida. Además, busca animar a alguien a confiar en el Señor compartiendo una verdad de estos salmos, de modo que otros también sean guiados a reconocer al Rey y Pastor de sus vidas.