Lo Que Solo Mi Dios Puede HacerMuestra

La promesa que hoy Él te da

La Palabra de Dios está llena de promesas, promesas para cada uno de sus hijos. Pero el simple hecho de que estén escritas no garantiza que las veremos cumplirse automáticamente. Muchas veces, para verlas manifestarse, se requiere un paso de fe y obediencia. Es como si Dios nos dijera:
"Aquí están, son tuyas… ¡tómalas!"
Pero, ¿realmente las tomamos?

Hoy quiero compartir contigo una promesa que encontramos en Mateo 11:28-30 (NBLA):

"Vengan a Mí, todos los que están cansados y cargados, y Yo los haré descansar. Tomen Mi yugo sobre ustedes y aprendan de Mí, que Yo soy manso y humilde de corazón, y hallarán descanso para sus almas. Porque Mi yugo es fácil y Mi carga ligera."

Después de reconocer que no podemos con todo, que somos limitados y humanos, viene el siguiente paso: soltar. Pero no soltar al aire ni a la suerte, sino soltar intencionalmente en las manos de Dios, creyendo que su Palabra es verdadera.

Él nos invita a venir tal como estamos: cargados, cansados, agotados, y a hacer un intercambio divino. Él toma nuestra carga pesada y, a cambio, nos entrega una que es ligera, una que no oprime sino que libera. Mateo 11:30 (NBLA) dice:
"Porque mi yugo es fácil y mi carga ligera."

¿Cuál es esa carga ligera?
Es la certeza de que, aunque estemos en medio de la tormenta, podemos tener paz, porque el experto está al mando. Ya no dependemos de nuestra fuerza, sino que el Dios victorioso pelea por nosotros.

Jesús ofrece un descanso que va más allá del descanso físico. Es descanso para elalma, alivio para el espíritu y consuelo en medio de las dificultades. No siempre significa que los problemas desaparezcan, pero sí que nuestra perspectiva cambia: encontramos esperanza, dirección y fortaleza en Él.

Y lo más hermoso de todo esto es que Jesús puede con cualquier tipo de carga:

• Duelo
• Miedo
• Tristeza
• Salud mental
• Impotencia
• Insomnio
• Perfeccionismo
• Baja autoestima
• Agotamiento físico
• Responsabilidades abrumadoras
• Presión económica
• Enfermedad
• Culpa
• Conflictos familiares
• Cuidar de otros
• Crisis de fe
• Religiosidad...

Por mencionar solo algunas.

Yo puedo testificar que he cargado con todo esto y más. Uno de mis mayores retos fue no saber decir "no". Las exigencias que me imponía a mí misma, sumadas a las que me imponía la religión, no me llevaban a la paz ni a la libertad, sino a una tormenta interior constante.
Vivía cansada, confundida y llena de miedo.
Hasta que un día dije "no" a las exigencias de la religión y a las mentiras del enemigo, y dije "sí" a la invitación que Jesús me hacía.

Hoy te invito a hacer lo mismo.

Ya es hora de descansar. Y el mejor descanso no se encuentra en un spa ni en unas vacaciones. El verdadero descanso para tu alma y para tu cuerpo se encuentra en los brazos de Jesús. Esa es la promesa que hoy Él te da.

Oracion
Señor, hoy acepto tu invitación. Vengo cansado y cargado, pero creo que en ti puedo encontrar el descanso verdadero y la fortaleza que necesito para seguir caminando. Gracias porque ya no tengo que vivir así. De aqui en adelante me comprometo a decir "no" a la mentira del enemigo que quiere sembrar culpa y digo "sí" a tus promesas.

Amén.