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Día 25: El Espíritu Santo me da fruto

Historia
Un árbol se conoce por su fruto: manzanas, peras, mangos… igual nosotros. Si el Espíritu Santo vive en nosotros, nuestra vida se llena de “frutos” visibles: amor, alegría, paciencia.

📖 Versículo clave

“En cambio, el fruto del Espíritu es amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, humildad y dominio propio.” — Gálatas 5:22–23 (NVI)

Explicación
No se trata de esforzarte solo. Es el Espíritu Santo produciendo en ti lo que refleja a Jesús. Como un árbol que da fruto naturalmente, así tu vida dará frutos de amor y bondad.

Aplicación práctica
Elige un fruto del Espíritu (por ejemplo, paciencia) y proponte practicarlo hoy.

🙏 Oración familiar
Espíritu Santo, haz crecer en mí tus frutos. Ayúdame a amar más, ser paciente, y mostrar a otros tu bondad. Amén.

🍎 Dato curioso
Un manzano puede producir más de 200 manzanas al año. ¡Imagina cuánto fruto puede dar tu vida con el Espíritu Santo!