¿Tengo Que Ir a La Iglesia?Muestra

El fabricante conoce el propósito

No es casual que estés leyendo esto. No es casual tu historia, tus heridas, ni siquiera tus dudas. Porque Dios no hace cosas al azar. Él es el Creador, y tú eres su obra intencional.

Puede que a veces no entiendas tu función en la iglesia. Tal vez miras a otros y piensas que su llamado es más claro, más visible, más útil. Pero eso no es verdad. No hay error en tu diseño. Fuiste formado con propósito, detalle y amor.

Dios te conoce mejor que tú mismo. Conoce tus fortalezas, tus luchas y ese deseo interno de pertenecer y hacer algo que importe. Y por eso, te colocó dentro de su cuerpo —la iglesia— para que descubras que ser parte no se trata sólo de asistir, sino de vivir tu diseño junto a otros.

A veces ese propósito se revela rápido. A veces se descubre sirviendo, probando, equivocándose, sanando. Pero siempre —siempre— está ahí. Y es más grande de lo que imaginas.

No te desconectes por no tener todas las respuestas. Acércate. Participa. Pregunta. Sirve. Porque el Fabricante no te soltó. Está trabajando, incluso en silencio, en revelar tu lugar perfecto en su historia.