Día Global de Oración Universitaria: Guía de Oración de 40 DíasMuestra

Día 2: Oraciones Audaces Cambian el Mundo

“Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede mucho."
– Santiago 5:16

“Si Dios controla todo, ¿por qué debo siquiera orar?"
¿Alguna vez has pensado así?
Si es así, no estás solo. Muchos de nosotros tenemos dificultades con la oración; tal vez no la comprendamos, o nadie nos enseñó a orar, o simplemente sentimos que no hace ninguna diferencia. Pero esto es lo que creo de todo corazón: la oración es la herramienta más poderosa que tenemos para conectar nuestra vida con Dios, combatir el pecado y ver cómo se produce un cambio en el mundo.

Sé que la oración puede parecer confusa o arriesgada. Pero también sé que, cuando oramos con audacia y fe, Dios se mueve. Realmente creo que una de las mayores razones por las que no vemos al Espíritu Santo obrando milagros a nuestro alrededor es porque no le estamos pidiendo que lo haga. Mi esperanza es que, como Iglesia global, empecemos a orar oraciones más grandes y audaces. Tenemos que orar oraciones que se sientan arriesgadas.

Vivimos en un mundo que necesita cosas grandiosas de Dios. Necesitamos que Él despierte los corazones de los creyentes de manera fresca y urgente. Necesitamos que haga que las personas se aparten del pecado y se vuelvan hacia Él. Necesitamos que los seguidores de Cristo en cada continente compartan audazmente el evangelio con los 5.500 millones de personas que aún no le conocen. En resumen, necesitamos que Él obre de forma grande y poderosa.

Muchos de nosotros nos quedamos estancados en esto. Nos importa tanto, pero tememos pedir a Dios que haga las cosas grandiosas por miedo a que diga “no” o a que simplemente no importe si oramos o no. Orar esas grandes oraciones nos resulta demasiado arriesgado.

Pero la oración sí cambia las cosas. Santiago 5 nos dice que la oración de los justos “es poderosa y eficaz”. Cuando presentamos nuestras peticiones audaces a Él en oraciones arriesgadas, Él oye y se mueve. ¡Nada es demasiado grande para Él! Su respuesta puede no ser siempre exactamente lo que imaginamos o esperábamos, pero aun así podemos orar con confianza. A Él le deleita nuestra fe y se conmueve con nuestras oraciones audaces.

Vale la pena arriesgarse.

PUNTOS DE ORACIÓN:

• Pide audazmente al Espíritu Santo que obre de manera milagrosa en cada continente.
• Ora para que Dios renueve en los creyentes de todo el mundo un deseo ferviente de compartir el evangelio con quienes les rodean.
• Ora para que aquellos que aún no creen en Jesús escuchen el evangelio, se arrepientan y se vuelvan a Él en fe.

Por Jennie Allen (Jennie es la fundadora y visionaria de IF:Gathering y Gather25 y es autora superventas del New York Times).