Ester - Para Este Tiempo Has LlegadoMuestra

El poder de Nuestras Palabras

Lectura: Ester 5:6-11; Proverbios 25:11

EOAO: Proverbios 25:11

“Manzana de oro con figuras de plata es la palabra dicha como conviene".

En el texto

Nuestras palabras tienen un poder increíble. Pueden sanar o herir, construir o destruir. En la Lectura de hoy, vemos a Ester eligiendo cuidadosamente sus palabras cuando habla con el rey Asuero. No se apresura ni reacciona impulsivamente. En cambio, escucha atentamente, responde con respeto y habla con sabiduría. Sus palabras son intencionales y reflexivas, lo que refleja un corazón que busca la guía de Dios.

Este momento de la historia de Ester nos desafía a considerar la manera en que usamos nuestras propias palabras. En nuestras conversaciones con amigos, familiares, compañeros de trabajo o personas con autoridad, ¿hablamos con palabras que alientan y animan, o nos apresuramos a hablar sin pensar? Proverbios 25:11 nos recuerda hermosamente que las palabras dichas en el momento adecuado y con el corazón adecuado son preciosas, como manzanas de oro en engastes de plata. Tienen el poder de cambiar una conversación, cambiar un estado de ánimo e incluso influir en los corazones de aquellos con quienes hablamos.

Querida amiga, ¿cuántas veces nos apresuramos en las conversaciones y perdemos la oportunidad de hablar con palabras de vida al corazón de alguien? Ester nos muestra que las palabras importan y que cuando nos detenemos para hablar con sabiduría y amor, honramos a Dios. Ya sea que estemos atravesando conversaciones difíciles o simplemente participando en momentos cotidianos, seamos conscientes de las palabras que elegimos. Que nuestras palabras reflejen el corazón de Cristo, lleno de gracia, verdad y bondad.

Pídele a Dios que guíe tus palabras hoy, confiando en que Él puede usar incluso las conversaciones más sencillas para plantar semillas de esperanza, sanación o aliento en el corazón de alguien. Es posible que nunca conozcas por completo el efecto dominó de una palabra amable, una respuesta gentil o un momento de gracia. Pero ten la seguridad de que Dios puede usar tus palabras para tocar vidas de maneras poderosas e inesperadas.

Oración

Amando Jesús, guía mi lengua hoy y llena mis palabras de sabiduría, amor y gracia. Ayúdame a escuchar con atención antes de hablar y a honrarte en cada conversación. Que mis palabras reflejen tu corazón y animen a quienes me rodean. Amén.